Cataluña  El secesionismo se muestra desunido en la huelga contra la sentencia del español

Este miércoles se ha convocado una nueva jornada de huelga en el sector educativo en Cataluña, en esta ocasión para protestar por la sentencia del TSJC que obliga a que al menos un 25% de las clases se den en castellano. Una huelga que ha empezado con tensión, porque algunos estudiantes se han enfrentado en la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB) con un grupo de piquetes que impedían que las clases se pudieran desarrollar con normalidad.

Otro grupo de estudiantes han cortado los accesos al campus desde la estación de Ferrocarrils de la Generalitat y se han desplegado por otras facultades. En unos casos sí han impedido que hubiera clases, mientras que en otros, se han visto a estudiantes acceder a las facultades por puertas de emergencia o incluso por las ventanas.

En la Universidad de Barcelona (UB) se han repetido escenas similares, grupos de piquetes que impedían las clases y en la Universidad Pompeu Fabra, han plantado sillas para impedir el paso.

No hubo foto unitaria

A esta huelga también se ha adherido el Govern, que esta mañana pretendía demostrar su apoyo con un acto, con una foto unitaria en las escaleras del Parlament, pero esta acción no ha salido del todo bien. Y es que no han participado ni buena parte de los miembros de Junts del ejecutivo (sólo ha asistido el consejero de Salud, Josep Maria Argimon), ni sus diputados.

Desde Junts argumentan que sus diputados no habían sido «convocados formalmente», los consejeros, sí, pero finalmente no han participado porque sólo han visto a diputados de ERC.