La crónica del Partido Popular
Feijóo reaviva el espíritu de «debate» de la Transición para recabar voto de centro
El presidente del PP acudió el miércoles al primero foro «El Debate con...» donde se presentó como una alternativa de centro y recalcó la poca «experiencia» de Vox en gestión
Hasta 25 veces mencionó el presidente del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, la palabra «debate» en su intervención del pasado miércoles en el primer foro celebrado por este medio. El aún presidente en funciones en Galicia quiere recuperar el espíritu de la transición en el que el entendimiento y la moderación dieron paso a la democracia. Desde esta perspectiva pretende convencer al votante de centro con unas líneas políticas en las que pondrá en valor «la experiencia» y la capacidad de diálogo.
«La calidad de una democracia se mide por la densidad y por la frecuencia de los debates. Es a través del debate como las diversas opiniones se contrastan y una vez contrastadas, se depuran y una vez depuradas, se decantan», expresó en el foro organizado por El Debate. Su discurso, frente a múltiples dirigentes populares como la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso; el alcalde de Madrid, José Luis Martínez Almeida; la secretaria general del PP, Cuca Gamarra y la vicepresidenta segunda del Congreso, Ana Pastor; entre otros. Una declaración de intenciones de lo que será –o ya es– el Partido Popular bajo su mando.
El presidente del PP no da puntada sin hilo. Sus palabras, medidas con exactitud, preparan el terreno para una estrategia que suscitó ciertas dudas en un principio pero que parece ir calando entre los ciudadanos. Así, al menos, lo dicen las encuestas. Feijóo no quiere enfrentamiento ni insultos y prefiere optar por la vía del «debate» para alcanzar acuerdos políticos con el Gobierno sin «ofrecer cheques en blanco».
La estrategia centrista de Feijóo suscitó dudas en un principio, pero las encuestas muestran un calado progresivo
«El respeto institucional que le debo a todos los representantes políticos, coincida o no con sus planteamientos, no lleva aparejado la aceptación de sus reglas de juego, en especial la que rechaza los debates en profundidad», mencionó el presidente popular añadiendo que, de lo contrario, «la democracia en su conjunto entrará en decadencia y estaremos creando un magnífico caldo de cultivo, en primer lugar para la frustración de la gente y, en segundo lugar, y como consecuencia, para los nuevos populismos».
Vox no es la prioridad
Sobre los populismos, entre los que Feijóo incluye a Vox, también se le preguntó al presidente popular que marcó su diferencia con la formación de Santiago Abascal en «la experiencia». De esta manera, el futuro candidato a las elecciones generales destacó su ventaja frente a Vox evitando entrar de manera directa en las diferencias ideológicas. Feijóo quiere poner en valor su experiencia en la gestión y avalarlo a través de las cuatro mayorías absolutas conseguidas en Galicia. «Es la diferencia entre lo que unos hemos hecho y lo que otros dicen que van a hacer», declaró para añadir que Vox no puede «acreditar experiencia, porque no la tienen».
El presidente del PP fija su mayor diferencia con Vox: la experiencia
El presidente del PP tiene como objetivo recuperar voto perdido en beneficio de Vox pero no es su meta principal. Feijóo aspira a una mayoría, o al menos a lograr el mayor número de escaños que le permita gobernar en solitario. Para conseguir estos números –casi imposibles en la política actual–, el gallego acudirá al centro. Un centro que rechaza a Vox y que no termina de estar contento con la presidencia de Pedro Sánchez.
No es un secreto ni pretende ocultarlo. Así lo demostró con una de sus frases más destacadas durante el discurso en el foro de El Debate: «Si el centro y la derecha están unidos, no hay duda de que ganaríamos las próximas elecciones».