El Supremo rectifica y acepta revisar los indultos del Gobierno a los líderes del procés

De vuelta a la casilla de salida. El Supremo ha deliberado, por segunda vez, sobre los indultos concedidos por el Gobierno de Pedro Sánchez a sus socios separatistas catalanes -los independentistas de ERC y PdCat- condenados por sedición, y malversación, tras liderar el referéndum inconstitucional del 1-O. La Sección Quinta de la Sala Tercera se reunía, este mismo martes, por segunda vez en el último año, tal y como avanzó en primicia El Debate, para decidir sobre si admitir la legitimación, al menos, de Partido Popular y Vox en su intento porque el Alto Tribunal entrase a analizar el fondo del asunto de la medida de gracia del Ejecutivo para con los separatistas.

En esta ocasión, y tras un cambio en la conformación de las mayorías de la Sala, tras la llegada de la magistrada Inés Huerta, que hizo pivotar la mayoría del Pleno de progresista a conservadora, ha arrojado un resultado positivo para los recurrentes. El Supremo abre la puerta, co su nueva decisión, a que los magistrados analicen si las motivaciones del Ejecutivo para decretar la puesta en libertad de los condenados por el Alto Tribunal fue suficiente y ajustada a la ley.

Fuentes próximas al Supremo confirman a El Debate que la balanza se ha inclinado mayoritariamente a favor de entrar en el fondo del asunto, gracias a los votos de los magistrados Wenceslao Olea, Fernando Román y la propia Inés Huerta. Por su parte, los otros dos miembros de la Sala Angel Arozamena y Octavio Herrero se han opuesto a dicha posibilidad y han anunciado la emisión de sendos votos particulares.

Tal y como El Debate reveló en exclusiva, el expediente en el que se apoyó el Consejo de Ministros para decretar la puesta en libertad de los líderes del 'procés' se basó en noticias de prensa afín al Ejecutivo, comentarios sindicales y encuestas favorables a la medida de gracia, ya consumada, de la propia Generalitat. Ahora, y a partir de este momento procesal, esta información cobra una especial trascendencia para el Tribunal que tendrá que analizar con lupa el dossier desvelado para determinar la idoneidad de los indultos en base a los argumentos recogidos en el mismo.

Hasta ahora, y por última vez el pasado mes de enero, el Supremo se había mantenido en la posición de la Abogacía del Estado que, al rescate del Gobierno, alegaba la falta de legitimación activa de los recurrentes para iniciar una acción judicial contraria a quienes aprobaron los Reales Decretos ministeriales que indultaron a los cabecillas del referéndum inconstitucional del 1-O.

Sin embargo, el Alto Tribunal que rechazó todos los recursos se ha abierto, a la revisión, esta vez sí, del fondo de los recursos planteados, al menos, por Partido Popular, Ciudadanos y Vox -que además fue parte en el proceso- contra los indultos del Gobierno socialista de Pedro Sánchez a los sediciosos. De este modo, la Sección Quinta de la Sala Tercera determinará, finalmente, si la conmutación de las penas de prisión al exvicepresidente de la Generalitat, Oriol Junqueras y los exconsejeros Jordi Turull, Josep Rull, Joaquim Forn, Raül Romeva y Dolors Bassa; a la expresidenta de la Mesa del Parlament, Carme Forcadell; y, a los dos activistas de Asamblea Nacional Catalana (ANC), Jordi Sánchez y de Omnium Cultural, Jordi Cuixart, fue arbitraria o si, por el contrario, la misma se ajustó a las reglas de la legalidad vigente para esta prerrogativa excepcional.