Madrid Así será la rehabilitación del Salón de Reinos para el Museo del Prado
Esta reforma permitirá desarrollar más exposiciones temporales y mostrar gran parte de las obras de la pinacoteca, fondos que permanecen ocultos por falta de espacio
El Salón de Reinos del Buen Retiro albergará desde este jueves las obras de rehabilitación arquitectónica y de adecuación museística. Esto permitirá que el Museo del Prado pueda desarrollar más exposiciones temporales y mostrar un mayor número de obras ocultas en sus fondos.
El propio museo ha indicado en un comunicado que la obra se ha adjudicado a la constructora UTE Sacyr Construcción, S.A.- Empty, S.L. por un importe de 34.873.165,52 euros.
El proyecto del Salón de Reinos está firmado por los estudios de Norman Foster y Carlos Rubio, ganadores del concurso internacional de ideas
En concreto, el renovado Salón de Reinos, antiguo Museo del Ejército, permitirá desarrollar más exposiciones temporales y mostrar gran parte de las obras de la pinacoteca, fondos que permanecen ocultos por falta de espacio.
Paso a paso de la rehabilitación
El Museo del Prado busca recuperar el espíritu del Palacio del Buen Retiro. El protagonista es el Salón de Reinos, un monumento que destaca por su fachada sur, original del s. XVII.
La recuperación de esta fachada pasa por el desmontaje de los forjados, de esta manera se revelará un espectacular espacio público: el nuevo atrio del Campus del Prado.
A través de una delicada intervención de apertura de los huecos de la fachada existente, la luz del día atravesará este espacio llegando de nuevo al Salón de Reinos, que también recupera su originaria relación con el paisaje.
La superficie suprimida en esta operación es restituida en planta tercera, por encima de la fachada recuperada, donde se dispone una nueva sala de exposición amplia y versátil que cuenta con una altura libre notable.
Una nueva cubierta permitirá dotar a este espacio de luz cenital controlada, así como de todos los elementos de iluminación artificial y climatización, totalmente adaptables a las obras a exponer.
La cubierta atenderá a los criterios de sostenibilidad, ayudando a captar la luz solar de forma adecuada y permitiendo el sombreado de la fachada sur.
Este movimiento permite liberar la planta baja, tornándose esta en el 'corazón' de la nueva edificación. Este nivel de uso público contará con espacios expositivos y de recreo donde a través del atrio el plano urbano penetrará en el edificio reconectando sus lados norte y sur. En este último se ubica la nueva entrada principal, allí se generará una plaza de acogida que recoge el flujo de visitantes procedentes del edificio Villanueva.