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La ministra de Igualdad, Irene Montero, acompañada por la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell

La ministra de Igualdad, Irene Montero, junto a Victoria RosellEFE

Archivada la denuncia que Rosell puso a su empleada del hogar acusándola de amenazas que no eran ciertas

El abogado de la trabajadora doméstica asegura a El Debate que está preparando una querella contra la alto cargo de Irene Montero por denuncia falsa

La Audiencia de Canarias confirma el archivo de la denuncia que Victoria Rosell, delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, interpuso contra su ex empleada del hogar a la que acusó de extorsión y amenazas. En estos momentos, Rosell, cargo de confianza de la ministra de Igualdad, Irene Montero, se encuentra en el punto de mira por haber sido la ideóloga de la polémica Ley del ‘solo sí es sí’.

El Debate ha tenido acceso al auto de archivo, dictado el pasado 29 septiembre por la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Canarias, donde se desestima el recurso que Rosell interpuso en los tribunales contra un auto judicial de 2020, en el que ya se sobreseyeron las actuaciones. Ahora se confirma esa resolución y se archiva definitivamente el caso.

Hace dos años, Rosell interpuso una denuncia contra su ex empleada del hogar, una ciudadana boliviana llamada Simona Chambi, a la que acusaba de los delitos de coacciones y amenazas. La alto cargo de la ministra Montero aseguraba entonces que su antigua trabajadora doméstica la chantajeó al asegurar que si no le pagaba una cantidad de dinero recurriría a la prensa para difundir una noticia falsa sobre su persona.

Dicha «noticia falsa» habría sido que llegara a conocimiento público que la empleada de hogar, a la que había despedido el pasado mes de julio, había trabajado para ella sin darle de alta en la Seguridad Social. La ex trabajadora estuvo en la casa de la delegada del Gobierno contra la Violencia de Género desde 2012 a 2015 y después desde esa fecha hasta julio pasado cuando fue despedida.

Sin embargo, desde el inicio, el primer magistrado que archivó el asunto ya mostró sus dudas. Así se pronunció así en el primer varapalo que recibió la ideóloga de la polémica Ley del ‘solo sí es sí’: «No existe indicio alguno sobre la perpetración de un supuesto delito de amenazas o coacciones, que es lo que la denunciante viene a significar en su comparecencia policial pues habla de un intento de chantaje hacia su persona para conseguir que pague para no salir en los medios una noticia falsa».

Los razonamientos del juez Florencio Luis Barrera Espinel continuaban de esta manera: «No concurre en el presente caso ningún tipo de violencia o intimidación dirigidas a la denunciante o a su pareja para que abonen la cantidad de dinero que reclama a éste último la denunciada, sino, simplemente, una aparentemente legítima reclamación extrajudicial previa a la interposición de la consiguiente y eventual demanda laboral en reclamación a unas cantidades a las que la denunciante cree tener derecho».

Tras el archivo de la Audiencia de Canarias, el abogado de la trabajadora doméstica, Federico José Vicente Marín, se encuentra preparando una querella por denuncia falsa contra la alto cargo de Irene Montero que será presentada en los próximos días.

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