Abascal pide al PP desde Hungría actuar con «altura de miras» para conformar una mayoría alternativa a Sánchez

Santiago Abascal se desplazó este viernes hasta Budapest donde mantuvo una reunión con el presidente húngaro, Viktor Orbán. Desde allí, a preguntas de la prensa sobre las negociaciones con el Partido Popular, el líder de Vox reiteró su posición de «mano tendida» para conformar una «mayoría alternativa» y pidió a la formación de Alberto Núñez Feijóo «altura de miras» y «patriotismo», como hiciera en su comparecencia de este lunes para valorar los resultados electorales.

«En España se ha producido una gran noticia, y no sólo es el excelente resultado de Vox, sino que se ha demostrado que ya existe una gran mayoría social al actual Gobierno de socialistas, comunistas, separatistas y terroristas», declaró en rueda de prensa junto a Orbán, y recalcó: «Los partidos que formamos parte de esa mayoría alternativa estamos ante un momento histórico en el que tenemos la obligación de actuar con altura de miras y con patriotismo, y nosotros tenemos la mano tendida para fortalecer esa alternativa».

Y es que la postura que han mantenido los dirigentes de Vox incluso antes de que se conocieran los resultados electorales ha sido el de mostrar su disposición a llegar a un acuerdo con el PP pero, eso sí, con «firmeza», sin regalar sus votos y exigiendo «respeto» a sus votantes. Para el partido de Abascal son dos las cuestiones clave en las negociaciones que de ahora en adelante se lleven a cabo en aquellos lugares donde la suma del PP y Vox puede desbancar de los gobiernos al PSOE: sacar a la izquierda y que no sigan aplicándose políticas de izquierda.

Desde Hungría, Abascal denunció «el acoso y la persecución ideológica» que padece el pueblo húngaro por «sus decisiones soberanas». Actuaciones que, a su juicio, son «el verdadero peligro para la unidad europea» y que abren «un peligroso precedente». En la actualidad –criticó–, son Hungría y Polonia los países que están siendo «chantajeados», y advirtió que pronto podría ocurrir con otra nación. «No podemos permitir que aquellos que nadie ha elegido decidan sobre lo que los pueblos han decidido soberanamente», remarcó. En este sentido, arremetió contra el presidente del Gobierno español por mentir a sus electores sobre los pactos y denunció, entre otras cosas, la derogación de la sedición con la reforma del Código Penal, el asalto a la Justicia o los efectos de la ley del 'solo sí es sí'.

Precisamente la defensa de la soberanía nacional y de la existencia de una Europa de naciones soberanas es uno de las banderas enarbolan los de Abascal y un punto en común con sus aliados europeos, como la primera ministra italiana Giorgia Meloni, el primer ministro de Polonia, Mateusz Morawiecki o el propio Orbán, como así han manifestado en numerosas ocasiones. De este último destacó, en declaraciones ante los medios, que haya rescatado a Hungría del comunismo y haya llevado al país «por la senda de la libertad y la soberanía».