Víctimas del terrorismo piden ante Marlaska y Bildu que los terroristas no puedan ir en las listas electorales
Todas las asociaciones de víctimas del terrorismo han rechazado participar en el homenaje que se les ha tributado en el Congreso de los Diputados
El presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Tomás Caballero, ha pedido ante la mirada del ministro del Interior, Fernando Grande Marlaska y de representantes de Bildu que «por dignidad democrática» los condenados por terrorismo no puedan «de por vida» formar parte de las listas electorales, tal y como viene haciendo la formación abertzale.
Tomás Caballero, hijo del concejal de UPN asesinado por ETA en 1998, ha subrayado las «paradojas» de la legislación española en un discurso pronunciado ante representantes de todos los partidos, incluido EH Bildu, la formación que incluyó en sus listas a las elecciones municipales del 28-M a exterroristas de ETA.
«Les pido que ante situaciones tan dolorosas como la de ver en las listas electorales a condenados por atentados terroristas, den un paso al frente y profundicen en la legislación que ya tenemos. Eviten que puedan convertirse en representantes de la soberanía popular quienes trataron de destruir los pilares de nuestra convivencia cobrándose la vida de nuestros padres, hermanos, hijos o amigos», ha sostenido Caballero.
Falsas equidistancias
En su discurso, el presidente de la Fundación Víctimas del Terrorismo ha recordado el «largo y tortuoso» de las víctimas para conseguir la «visualización de una única verdad alejada de falsas equidistancias» para «salvarnos del segundo crimen, que sería el olvido» y la «impunidad» de los actos terroristas. También ha reclamado que la progresión de grados penitenciarios «se atenga a los criterios establecidos por la legislación pertinente», sin «subordinación de la justicia», ya que esto «atentaría directamente contra la dignidad de las víctimas».
«Reclamo de todos ustedes, señoras y señores diputados y senadores, una legislación que de verdad incentive la colaboración en el esclarecimiento de los atentados no resueltos, ya sea como determinante para acceder a ciertos beneficios penitenciarios, o ya sea para impedirlos a los condenados por terrorismo que no evidencien arrepentimiento alguno por sus acciones terroristas», ha dicho.
Además, Tomás Caballero ha lamentado que muchas de sus reivindicaciones hayan quedado encima de la mesa con la convocatoria de elecciones generales el 23-J. En concreto, ha citado el informe del Parlamento Europeo de 2022, mencionando que sigue habiendo más de 300 asesinatos de la banda terrorista ETA pendientes de esclarecer o que debe avanzar la atención a las víctimas en la equiparación de las indemnizaciones haya o no sentencia judicial.
Sin las asociaciones
El homenaje a las víctimas del terrorismo ha tenido lugar este martes en el Congreso de los Diputados aunque, paradójicamente, ha tenido lugar sin la presencia de las principales asociaciones de víctimas ya que éstas no han querido acudir ante la presencia de los representantes de Bildu, que en sus listas electorales de las municipales incluyeron hasta 44 condenados por terrorismo, y en protesta por la consideración de «socio preferente» de los abertzales por parte del Gobierno.
«No se puede homenajear a las víctimas del terrorismo y gobernar con el apoyo de los que son los representantes de ETA en las instituciones», sostiene la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT), que por cuarto año consecutivo se descuelga del acto.
El Colectivo de Víctimas del Terrorismo (Covite) tampoco ha acudido por la presencia de «partidos políticos que justifican la existencia de ETA y que no condenan la violencia terrorista», en alusión a Bildu, algo que la presidenta de Covite, Consuelo Ordóñez, considera «un ejercicio de cinismo».
También Dignidad y Justicia (DyJ) anunció su ausencia en el acto por su rechazo al Gobierno de Pedro Sánchez y sus pactos con Unidas Podemos y Bildu. «Sánchez, Iglesias y Otegi se han unido para dar la espalda a las víctimas y blanquear a los terroristas», señaló la asociación que preside Daniel Portero, que rechaza «dar pábulo a ese juego perverso que aprovecha los votos de sangre».