Abascal advierte a Feijóo de que Vox no va a aceptar el «chantaje» del PP en Extremadura

El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha advertido a su homólogo del Partido Popular, Alberto Núñez Feijóo, durante una entrevista en el programa La hora de la 1, en TVE, que no va a a aceptar el «chantaje» de su partido y ha resaltado la importancia de alcanzar un acuerdo para que la derecha gobierne en Extremadura: «Más nos vale».

«Hemos prometido a la gente que nos ha votado que no vamos a regalar su confianza», ha apuntado Abascal, quien ha afeado a Feijóo que «en los últimos seis meses está diciendo que debe gobernar la lista más votada, pero por desgracia en Extremadura ha sido la del PSOE». «Por fortuna se ha producido una mayoría alternativa», se ha congratulado.

Abascal ha lamentado que desde las filas 'populares' «se demonizase a Vox, aceptando el marco mental de la izquierda» y ha indicado que ha «tenido contacto con el señor Feijóo y le he trasladado lo que acabo de decir». El líder de Vox ha proseguido recordando cómo en otras comunidades autónomas el PP, según ha afirmado, no ha cumplido con su palabra.

«En Murcia se ha incumplido el acuerdo de investidura, como en muchos otros lugares», ha criticado sobre un pacto en el que después «el PP incorporó a su Gobierno a los tránsfugas de Vox». «No nos podemos fiar de quien ha incumplido el acuerdo de investidura», ha añadido sobre esta cuestión.

Cuestionado sobre si a partir de ahora Vox va a exigirle al PP entrar en los gobiernos donde los 'populares' precisen su apoyo, Abascal ha señalado que puede depender de cada caso concreto, pero que le «parece normal entrar donde Vox sea necesario para conformar una mayoría alternativa». «Vox no va a aceptar que se le aplique un cordón sanitario y medidas discriminatorias», ha defendido.

Preguntado por la periodista Silvia Intxaurrondo sobre la sensación de que a Feijóo le incomoda «ir juntos caminando de la mano» con Abascal, el líder de Vox ha sonreído y ha asegurado que lo que él quiere es «formar una mayoría alternativa», no «caminar de la mano» y ha reconocido que «es probable que –el presidente del PP– tenga cierto reparo». «Nosotros también tenemos muchas diferencias con el PP; hay muchas cosas que no nos gustan», ha añadido.

Un gobierno nacional con Vox

Al ser cuestionado sobre si pretende llegar a ser vicepresidente de un gobierno encabezado por Feijóo, Abascal ha recordado que él y su partido se presentan a las elecciones generales del próximo 23 de julio para tratar de lograr la Presidencia, aunque ha precisado que reconocerán «el veredicto de las urnas». «Si la fuerza que se da a Vox es determinante, lo razonable es que Vox forme parte de la mayoría alternativa en el Gobierno».

En este sentido, ha abundado en que, dado que «los acuerdos de investidura con el PP han sido infructuosos y no han sido cumplidos en muchos lugares y han quedado en papel mojado, parece razonable que nosotros –Vox– participemos también en los gobiernos». Sobre este tema, Abascal ha lamentado que Vox y PP han «perdido un mes precioso sin hacer lo que tenemos que hacer: una campaña electoral para derrotar a Pedro Sánchez el mes de julio».

La entrevista se tensa

Poco a poco, la entrevista del líder de Vox en TVE se ha ido tensando con los entrevistadores, principalmente con la citada Intxaurrondo. Ésta le ha preguntado sobre el Convenio del Consejo de Europa sobre prevención y lucha contra la violencia contra las mujeres y la violencia doméstica, al que se ha referido como el «Convenio de Estambul», que es contra la «violencia de género».

Abascal ha admitido que no lo conocía, ha tildado al «género» de «concepto terminológico» y ha recordado que su partido pide «la prisión permanente revisable para los criminales sexuales». También ha avisado que no va «a aceptar de ninguna manera» se le demonice y se deje entrever que están «a favor de la violencia contra las mujeres».

Preguntado sobre si va a asistir a alguna de las celebraciones del orgullo gay, el presidente de Vox ha contestado que «no lo tenía pensado, entre otras cosas porque soy heterosexual» y ha apuntalado que esta fiesta «tiene mucha menos importancia de lo que algunos políticos y lobbies nos quieren hacer creer». Asimismo ha zanjado esta cuestión con que «muchos gais que pueden votar a Vox no se sienten representados» con este tipo de eventos.

También se ha sentido visiblemente molesto Abascal cuando se le ha inquirido sobre si su partido va a renunciar a las subvenciones públicas, ya que su partido pide el fin de estas ayudas para las formaciones políticas. «Si creen que Vox es el único partido que debe renunciar, están muy equivocados. Pedimos el fin de las subvenciones públicas a partidos, sindicatos y, por supuesto, lobbies ideológicos. El dinero de los españoles debe ir destinado a crear riqueza y generar empleo», ha denunciado, y ha afeado a la cadena que a Vox solamente se le dedica el 1,3 % del total del tiempo que se emplea a dar voz al conjunto de las formaciones políticas.