El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en Bruselas
La Junta Electoral expedienta a Sánchez por sus ataques a PP y Vox en el Consejo Europeo
El presidente del Gobierno aprovechó la rueda de prensa posterior para criticar a la oposición
La Junta Electoral Central ha notificado este miércoles que abre un expediente por los ataques de Pedro Sánchez a PP y Vox durante la rueda de prensa del 30 de junio en Bruselas con motivo del Consejo Europeo.
El presidente del Gobierno, a las puertas de que España asumiera la presidencia rotatoria del Consejo de la Unión Europea, dedicó más de la mitad de su conferencia de prensa en Bruselas para criticar abiertamente a la oposición. Los pactos a los que habían llegado días antes PP y Vox en Extremadura y la Comunidad Valenciana no fueron del agrado de Sánchez y lo demostró ante los medios.
El candidato del PSOE a las elecciones del 23-J olvidó por un momento que estaba ejerciendo en Bruselas de presidente del Gobierno y aseguró que había mantenido conversaciones con los líderes europeos sobre los pactos de lo que él llama ultraderecha y que estos estaban «contrariados» con lo que estaba ocurriendo en España.
«Lo que estamos viendo allá donde el PP pacta con la ultraderecha es un recorte obsceno de los derechos a cambio de votos. Quitar una bandera LGBI de una fachada de una institución pública es quitar derechos, es no reconocer unos derechos que están reconocidos por ley. Esto causa sonrojo en Bruselas, donde he tenido conversaciones con distintos líderes que están sorprendidos y contrariados con la involución que se está produciendo en España desde el 28 de mayo», aseguró el presidente del Gobierno.
Reincidente
Esas declaraciones no sentaron bien en el seno del Partido Popular, que denunció el caso a la Junta Electoral, pero tampoco en Bruselas. La Comisión Europea guardó silencio públicamente al respecto pero sí hizo saber su malestar en Moncloa, donde la recomendaron a Sánchez separar a partir de entonces la política nacional de la europea en las siguientes comparecencias.
La Junta Electoral Central no apercibe al presidente del Gobierno, sino que directamente le abre expediente. Esto se debe a que el candidato socialista ya incurrió en el mismo fallo en 2019, cuando mezcló su condición de líder del Ejecutivo y la de candidato.
