Prisión de Basauri, en una imagen de archivo
Los presos también votan a través de Correos
Los carteros también han tenido que desplazarse a las prisiones para llevar la documentación a los presos que lo han solicitado
Los presos de las cárceles españolas también se han podido ver afectados por el colapso de Correos ante la avalancha de solicitudes de voto por correo que ha vivido España en la convocatoria electoral de este próximo 23 de julio. Y es que la población penitenciaria con nacionalidad española, en su inmensa mayoría, también tiene derecho a voto. Así es desde que en el año 1995 una reforma del Código Penal les permitió un derecho del que hasta entonces no disponían. Y los que lo ejercen tienen que hacerlo mediante el voto por correo.
En España había a comienzos de este 2023 en torno a 56.000 personas en las cárceles españolas, incluyendo las cárceles catalanas y vascas, que tienen las competencias penitenciarias, según el sindicato ACAIP-UGT.
Según el informe Space I del Consejo de Europa de 2022, el 73 % de la población reclusa tiene la nacionalidad española, es decir, tienen derecho a voto. Y según los últimos datos disponibles, de las elecciones generales de 2019, tan solo el 12,5 % de los reclusos con derecho a voto lo ejercen. Aquel año fueron poco más de 5.500 reclusos.
¿Cómo votan los presos?
Los presos votan como cualquier ciudadano con la única salvedad de que ellos no pueden desplazarse a los colegios electorales. Por lo tanto, tienen que votar por correo.
Para ello, cada preso avisa al Centro Penitenciario que quiere votar. Éste solicita a Correos la documentación necesaria para que el reo pueda ejercer su derecho mediante una instancia que se rellenará con el DNI del preso.
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La Oficina del Censo Electoral envía a cada prisión a través de Correos tanto las papeletas como los sobres necesarios. El preso introducirá la papeleta que elija en el sobre correspondiente y éste en otro más grande que será enviado a la mesa electoral que le corresponde.
Como en cualquier voto por correo, será la entidad pública quien se encargue de transportar el voto del preso a la mesa electoral el día de las elecciones. En este caso, el 23 de julio. Y allí se recontará como un voto cualquiera.
