Sumar presiona al PSOE para que ceda la Presidencia del Congreso para sumar apoyos
Los afines a Yolanda Díaz quieren que Sánchez use la presidencia del Congreso como moneda de cambio para asegurarse la investidura
Los números siguen sin cuadrar y Sumar pide a Pedro Sánchez que comience a dar pasos más firmes para recabar apoyos.
El portavoz de Podemos en el Congreso, Pablo Echenique, recordó que nada obliga a que la Presidencia del Congreso recaiga en el PSOE. De hecho calificó de «temeridad» la posibilidad de que los socialistas volvieran a proponerla, algo que ya ha quedado descartado por el partido socialista y la propia Batet.
Otra de las voces que han sugerido la cesión de la presidencia ha sido en diputado Enrique Santiago: «La propuesta que ha hecho el señor Echenique u otro cualquiera, pues son propuestas que se tienen en cuenta y habrá que discutirlas colectivamente como corresponde para fraguar alianzas», ha apuntado.
De una manera similar se pronunció el propio ex vicepresidente del Gobierno Pablo Iglesias que preguntó de manera retórica si la presidencia del Congreso iba a ser para el PSOE subrayando que no era algo imprescindible por reglamento.
Joan Baldoví, portavoz de Compromís en el Congreso, también ha aconsejado al PSOE contemplar la opción de ceder la Presidencia para allanar el acuerdo con las minorías. A su juicio, ese cargo no tiene «porque ser sí o sí» para el PSOE y lo podría asumir cualquier otro partido, lo que «reflejaría la pluralidad de los resultados que se dieron hace unos días».
También la diputada electa de Compromís por Valencia Águeda Micó se ha pronunciado sobre este asunto, considerando que no habría que cerrarse a incorporar a partidos independentistas a la Mesa del Congreso. «Necesitamos acuerdos políticos, acuerdos en los órganos del Congreso y acuerdos de investidura, por tanto, yo no dejaría a nadie atrás con relación a poder tener mayorías parlamentarias», ha defendido.
La número dos ERC en el Congreso, Teresa Jordà, confirmó este lunes que el PSOE y Sumar ya habían empezado a tantear a los independentistas. El plan es que las minorías apoyen al candidato de la izquierda para la Presidencia a cambio de que los socialistas cedan una de sus Secretarías al PNV o los independentistas y de que se garantice vía libre para los grupos parlamentarios de ERC y de Junts, que al no cumplir literalmente todos los requisitos reglamentarios pueden quedar al albur de la nueva Mesa de la Cámara.