PSOE y Bildu levantan las cartas de su pacto: Gobierno, para los socialistas; ayuntamientos, para los abertzales

Prácticamente al tiempo que el candidato socialista a la presidencia del Gobierno, Pedro Sánchez, pronunciaba la palabra «amnistía» hacia los catalanes como forma de «favorecer la convivencia», el PSOE de Navarra votaba a favor del candidato de Bildu, Xabier Alcuaz, para presidir la Federación Navarra de Municipios y Concejos.

De esta forma, se ponía sobre la mesa el pacto alcanzado el pasado verano entre los socialistas navarros y Bildu: el PSOE se queda con el Gobierno de Navarra de la mano de María Chivite y Bildu se queda con los ayuntamientos. Al fin y al cabo, la Federación Navarra de Municipios y Concejos es una de las instituciones con más peso en la Comunidad Foral debido a las competencias que le otorga la foralidad de Navarra.

El secretario de Organización del PSOE navarro, Ramón Alzórriz, calificó el apoyo de las entidades locales lideradas por socialistas a la candidatura de Xabier Alcuaz, de EH Bildu, a la Presidencia de la Federación Navarra de Municipios y Concejos (FNMC) como un voto «en contra de Alejandro Toquero», alcalde de Tudela y candidato de UPN, por «atacar y confrontar con el Gobierno de Navarra».

«No es de recibo que una persona y un partido, que está todo el día insultándonos, atacándonos y confrontando con el Gobierno, quiera nuestro voto», defendió el socialista en declaraciones a Europa Press

Sin embargo, los socialistas también negaron el voto a otro candidato regionalista que no era Toquero y prefirieron respaldar al candidato de la formación que ni tan siquiera es capaz de condenar el ataque con excrementos a la tumba del dirigente socialista Fernando Buesa.

Para el candidato regionalista, Alejandro Toquero, «lo que estamos viendo, con el beneplácito del Partido Socialista, es una euskaldunización de las entidades de nuestra comunidad». Consideró que los socialistas han preferido que tenga la presidencia de la FNMC «un partido político que no tiene representación en la mitad de Navarra».

Bildu siempre se ha considerado a sí misma una formación municipalista. La misma noche del 28 de mayo, día de las elecciones municipales, alardeó de ser la formación que más concejales había obtenido. Lo que no decía es que en muchos municipios era la única formación que se presentó ante el miedo que todavía persiste entre los constitucionalistas a presentarse en determinadas localidades.

Moción de censura en Pamplona

Este pacto destapado el viernes en Navarra abre la puerta a un rumor que en las últimas semanas se está intensificando en la Comunidad Foral: Bildu prepara una moción de censura en Pamplona para echar a UPN con el apoyo de los socialistas que podría presentar después de que Pedro Sánchez sea investido presidente del Gobierno, en caso de que sea investido.

El diputado del PP por Navarra, Sergio Sayas, afirmó el pasado martes que «a los navarros nos gustaría saber muy específicamente si esta Comunidad (en referencia a Navarra) está formando parte de ese diálogo de Sánchez con Bildu» en el marco de un proceso de investidura a nivel nacional, porque, según ha indicado, con EH Bildu «nada es gratis».

El presidente de UPN, Javier Esparza, consideró el pasado lunes, tras reunirse con el Rey dentro de la ronda de consultas, que «es raro que Bildu no esté teniendo una posición exigente con este Gobierno: no está pidiendo nada públicamente, por lo que suponemos que por detrás ha conseguido lo que quería». Este viernes, el PSOE navarro lo evidenció.