Michavila, de GAD3, y Silva, de Target Point, analizan el ascenso de Alvise Pérez en las europeas

La gran sorpresa en las elecciones europeas, a pesar de que ya lo anticiparon la gran mayoría de las encuestas, ha sido la entrada por primera vez en un parlamento de la agrupación de electores Se Acabó la Fiesta, que dirige el polemista Luis Pérez, conocido con el sobrenombre de Alvise. Esta formación ha logrado quedar en sexto lugar con más de 800.000 votos; aunque con sus tres eurodiputados ha empatado a nivel de representantes con la coalición secesionista Ahora Repúblicas –que conforman ERC, Bildu y el BNG– y con Sumar. Además, ha obtenido un escaño más que Podemos.

De esta manera, el director de análisis de la empresa Target Point, José Miguel Silva, ha explicado a El Debate que «los datos brutos del CIS de antes de las elecciones nos decían que prácticamente un 20 % de los votantes de Alvise eran nuevos votantes. Y un 27 % gente que no había votado o que había votado nulo. Eso es un 47 %, una barbaridad, casi la mitad de sus apoyos. El resto se divide entre antiguos votantes de Vox, del PP, y de Ciudadanos; y muy poco de izquierdas».

Por su parte, Narciso Michavila, presidente de la consultora de investigación social GAD3, ha señalado a este periódico que «el perfil del votante de Se Acabó la Fiesta es en un 80 % gente joven tecnológica, conectados a las redes sociales, y que en el pasado pueden haber votado a la derecha». El sociólogo también ha destacado que en otros países europeos, «como en Chipre» hay «algún influencer» que ha conseguido representación en elecciones con «partidos no alineados».

En este contexto, el director de análisis de Target Point ha subrayado que el resultado de Alvise Pérez «es una sorpresa relativa», dado que «todas las encuestadoras veíamos que sí iba a entrar; y estaba por medirse el volumen de los escaños que iba a conseguir». «A nivel demoscópico 800.000 votantes tiene mucho mérito teniendo en cuenta que es una formación que ha nacido hace nada y que se ha movido en redes sociales, porque realmente los medios masivos de comunicación, especialmente televisión, radio, etcétera, prácticamente no le han dado nada de cancha. Su presencia es sobre todo en redes sociales, en su canal de Telegram o en algunas entrevistas que ha que le han concedido en canales especializados de YouTube. Y todo eso demuestra que hay un porcentaje de la población enorme que se informa por canales alternativos», ha agregado.

El propio líder de Se Acabó La Fiesta concedió una entrevista en el canal de YouTube Distrito TV, en la que, tras ser preguntado por su opinión de los medios de comunicación, afirmó que son «prostitutas, vasallos, furcias de la información. Negocios de extorsión. Son criminales, absolutamente, que se han dedicado a cobrar comisiones a grandes empresarios, tanto del IBEX como grandes empresas privadas, para hacer dinero».

Para Michavila, Alvise tiene «el discurso clásico y típico de todos los populismos», con el que argumenta que «voy a luchar contra la caspa», y que suele triunfar más en los comicios comunitarios porque «se vota a la carta». Sobre ello, José Miguel Silva ha manifestado que es «un discurso bastante duro, rompedor, y por eso también llega a gente que quizás está harta, cansada, del Gobierno de coalición actual. Votantes que ven que quizás el PP no les llega con su discurso, que lo ven un poco más blando y difuso. Vox sí era una derecha más dura que probablemente se pueda acercar a ciertos postulados de Alvise en cuanto a dureza de mensaje o contra la inmigración irregular». «Yo creo que él tiene en mente una especie de Bukele en cuanto a mano dura con corruptos y con delincuentes», ha agregado.

De hecho, en la entrevista en Distrito TV el líder de Se Acabó la Fiesta hizo mención al presidente salvadoreño Nayib Bukele: «Tengo la conciencia muy tranquila. ¿escrúpulos sí o escrúpulos no? Con los criminales no. He visto yo unos terrenitos, al este de Madrid, muy cuquis, muy bonitos. En donde voy a construir una cárcel para 40.000 personas. Bukele se queda blando. ¿Sabes qué voy a hacer con esa cárcel, entre otras cosas? Meter en prisión a Pedro Sánchez Castejón. Y vendrá la ONU, amigo mío, vendrán las organizaciones de Derechos Humanos a decirme que lo que estoy haciendo es una barbaridad, y yo les diré que lo único que estoy haciendo es aplicar el Código Penal español, porque yo no soy un tirano. Yo sí creo en la democracia».

Además, el presidente de la consultora de GAD3 ha indicado que es «evidente» que Pedro Sánchez ha aupado a Alvise, mencionándolo en sus mítines durante la campaña. A su vez, Silva ha avisado que «lo que ha sucedido puede acontecer en unas elecciones próximas; que salga otro outsider. Si es una persona que tiene potencia en redes y se lanza a la aventura y mueve a su gente, pues podría conseguir algún tipo de representación».