Fundado en 1910

18 de septiembre de 2024

Valle de los Caidos

Panorámica del Valle de los Caídos

Investigación

Investigan a la profesora que Moncloa contrató para analizar los restos del Valle de los Caídos por dar un sobresaliente a un trabajo plagiado

Inmaculada Alemán Aguilera forma parte del equipo que el Ministerio de la Presidencia ha contratado para llevar a cabo estudios antropológicos

La Universidad de Granada ha abierto una investigación a la profesora Inmaculada Alemán Aguilera por dar la calificación de sobresaliente a un alumno que cuenta con un trabajo plagiado. Se trata de la docente que el Gobierno ha designado para dirigir al equipo que analiza los restos exhumados en el Valle de los Caídos. El caso al que ha tenido acceso El Debate incluye la denuncia de un prestigioso catedrático que alertó que un alumno había presentado a Alemán Aguilera un trabajo copiado con su firma falsificada. Pese a ello, la profesora aceptó el trabajo y le dio una calificación de 9,5 sobre 10. Desde la institución académica se guarda silencio: «Se está investigando».

Los hechos afectan a la profesora que el Ministerio de la Presidencia, a través de Patrimonio Nacional, ha contratado para dirigir los análisis antropológicos de los restos que se están exhumando en el Valle de los Caídos. Esta contratación se llevó a cabo a través de la Universidad de Granada por un importe de 60.000 euros. En concreto, Alemán Aguilera figura como responsable del proyecto de investigación en el Laboratorio de Antropología Física, dependiente de la entidad universitaria, donde se están llevando a cabo los estudios.

En el centro de la imagen, vestida con chaqueta roja, Ana de la Cueva, presidente de Patrimonio Nacional. A su lado la profesora Inmaculada Alemán Aguiler

En el centro de la imagen, vestida con chaqueta roja, Ana de la Cueva, presidenta de Patrimonio Nacional. A su lado, de negro, la profesora Inmaculada Alemán AguileraUGR

La denuncia contra Alemán Aguilera se produjo el pasado 10 de julio, cuando Miguel Botella, conocido catedrático de Antropología Física de la Universidad de Granada, pidió por escrito al rector, Pedro Mercado, que investigara a la profesora por haber dado un sobresaliente a un trabajo plagiado y que, para más inri, contaba con su firma falsificada. Botella fue director del Trabajo Fin de Máster (TFM) titulado «Paleopatología en la colección del laboratorio de antropología de la Universidad de Granada» del alumno Alejandro P.C. , que se presenta como «el médico forense titular más joven de Aragón» y que en estos momentos está destinado en el Instituto de Medicina Legal de Zaragoza. Tras recibirlo para ser corregido, el catedrático comunicó al estudiante que se trataba de un trabajo plagiado y que, por este motivo, no podía ser aceptado.

La herramienta Turnitin, que se usa en el ámbito universitario para detectar plagios, de uso obligatorio por parte de los profesores, concluyó que el alumno, había copiado el 46 % del trabajo. A pesar de esta irregularidad, Alejandro P.C. envió el trabajo a través de la aplicación electrónica de la universidad con la firma falsificada del catedrático y seguidamente fue convocado por la profesora contratada por Moncloa para que presentara el trabajo en un tribunal que presidía ella misma. Con estos antecedentes, la profesora, coordinadora del máster, aceptó el trabajo y le puso un 9,5 sobre 10. A continuación, el estudiante subió a sus redes sociales una fotografía posando con el trabajo plagiado con un emoticono de dos copas de champán brindando.

Quejas de los alumnos

Según la denuncia, el catedrático Botella se enteró por las redes sociales de que el alumno, con el trabajo plagiado y con su firma falsificada, había recibido un sobresaliente. «Ahora me encuentro que el trabajo se defendió ante un tribunal presidido por la coordinadora del máster con una autorización que pretendía ser mía, cuya firma está burdamente falsificada», indica en su carta al rector. Seguidamente, explica que los alumnos que asistieron a la defensa del trabajo «se quedaron escandalizados y protestaron». «La falsedad documental al haber recortado de un documento mi firma y haberla pegado en el documento de autorización para la defensa de ese trabajo es tan clara que no admite la menor discusión», añade.

De la misma manera, y antes de hacerlo con el rector, notificó estos hechos a Marta Cuadros Celorrio, del Vicerrectorado de Posgrado y Formación Permanente. «Solicito que los servicios jurídicos tomen cartas en el asunto», escribió Botella. En referencia a la falsificación de su firma sostiene que «me parece una tomadura de pelo» y añade que «se trata de un recorte de mi firma pegado a un escrito». A continuación señala que la profesora contratada por Moncloa, conocedora de los hechos, está intentando eludir sus responsabilidades. «Algo predecible, pero lamentable», finaliza.

Por su parte, Cuadros Celorrio respondió al catedrático pidiéndole que olvidara el incidente afirmando que «creo que como el alumno ya ha sido evaluado, si a ti te parece bien, podríamos cerrar esta queja», a lo que Botella se negó. En paralelo, también denunció los hechos ante la Inspección de Servicios de la Universidad de Granada, donde incide en el papel de Alemán Aguilera. «La coordinadora del máster admitió ese TFM plagiado. Ella con toda seguridad recibió el informe de Turnitin e hizo caso omiso». Fuentes universitarias explican a este periódico que no es la primera vez que surgen irregularidades contra la profesora que ahora trabaja en el Valle de los Caídos. «Se están investigando los hechos», sostienen. Alemán Aguilera traslada a El Debate que el trabajo plagiado «cumplía con los criterios establecidos en la norma para ser aceptado». El catedrático, por su parte, opta por guardar silencio «hasta que concluya la investigación».

El enfado de Botella en su escrito al rector es palpable. «No voy a dejar pasar este atropello a los intereses de mi universidad como institución a la que pertenezco, que además son los míos personales, porque se me ha involucrado en un hecho ilegal. Y además aparece mi nombre como director de un trabajo, que ni cuenta con mi aprobación ni autorizaría jamás, algo que no estoy dispuesto a consentir de ninguna manera», concluye. Al mismo tiempo que pide que se investiguen los hechos solicita al rector que «tome la decisión más adecuada».

¿Conoces algún hecho irregular que quieres que investigue y cuente El Debate? Escribe a investigacion@eldebate.com si tienes pistas o indicios que consideras relevantes. La verdad siempre merece ser contada.

Comentarios
tracking