La familia de los españoles detenidos en Venezuela denunció su desaparición el 9 de septiembre en redes sociales
El padre de uno de ellos afirma que los dos jóvenes de Bilbao se encontraban allí «de vacaciones»
El padre de Andrés Martínez Adasme, uno de los dos españoles detenidos en Venezuela, ha asegurado que su hijo y el otro arrestado estaban de vacaciones y que no pertenecen a los servicios de inteligencia de España.
Ambos son de Bilbao y están retenidos por «conspiración» y por su «vinculación al Centro Nacional de Inteligencia», según anunciaba el ministro de Interior y Paz del régimen chavista, Diosdado Cabello.
«Mi hijo no trabaja para el CNI, claro que no. Estamos esperando información por vía consular y de la embajada», declaraba a El Mundo, que aún no conocían «bajo qué acusación o motivo lo han detenido». Según narra el progenitor, su hijo «estaba desaparecido en un viaje en Venezuela y ahora está en Caracas, es cuanto sé», exponía.
Añadía que él se encargó de dar parte de su ausencia a la empresa en la que trabajaba, sin dar más datos. Como se mantenía a la espera de «una llamada de la embajada», la conversación telefónica terminó.
Lo denunciaron el 9 de septiembre
La familia de los dos españoles denunciaron su desaparición por redes sociales. Publicaron un mensaje en una cuenta colombiana de Facebook el 9 de septiembre: «Estamos buscando a José María Basoa Valdovinos y Andrés Martínez Adasme, quienes fueron vistos por última vez en Inírida, Colombia, el lunes 2 de septiembre, rumbo a Puerto Ayacucho, Venezuela. Ambos viajaban sin guía y no hemos tenido noticias desde su última conexión telefónica ese mismo día a las 8:23 am».
La Embajada de España en Venezuela continúa a la espera de poder contactar con los dos detenidos que se encuentran acusados de terrorismo para verificar sus identidades y nacionalidad. Y, de confirmarse que sean ciudadanos españoles, conocer con exactitud su acusación y ofertarles toda la asistencia necesaria.
Por su parte, el régimen chavista comunicó en el canal estatal Venezolana de Televisión (VTV), por boca de Diosdado Cabello, que fueron capturados por una supuesta operación para llevar a cabo «actos terroristas» con el fin de asesinar a Maduro y otros funcionarios venezolanos.