Marlaska cancela la compra de millones de balas a una empresa israelí adjudicada hace ocho días
La ministra de Defensa, Margarita Robles, había asegurado que desde el inicio de la guerra no se compraban armas a este país
«El Ministerio del Interior ha puesto en marcha el proceso para rescindir la adjudicación a una empresa israelí de un contrato de adquisición de cartuchería 9 x 19 mm. PB NATO para la Guardia Civil». Con esta frase, el ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska anuncia la cancelación de la compra de balas por valor de más de seis millones y medio de euros que había sido adjudicada hace tan solo ocho días.
La ministra de Defensa, Margarita Robles, aseguró por carta hace unos días que su Ministerio no compraba armamento a empresas israelíes desde el pasado de octubre de 2023, cuando el país sionista inició una guerra contra los terroristas de Hamás a raíz del ataque que sufrió hace más de un año.
Sin embargo, ese veto se circunscribía tan solo al Ministerio de Defensa y la Guardia Civil, aunque tiene algunas competencias dependientes de Defensa, contrata armas y equipamiento a través del Ministerio del Interior.
En una nota de prensa, el Ministerio del Interior explica que «el Gobierno español mantiene el compromiso de no vender o comprar armamento al Estado israelí desde que estalló el conflicto armado en el territorio de Gaza». Sin embargo, en la misma nota afirma que el contrato de más de 15 millones de balas «fue licitado el 21 de febrero de 2024. La adjudicación se realizó el 21 de octubre de 2024, y dos de los tres lotes contratados correspondieron a una empresa israelí».
Esta rectificación se produce después de que la información fuera destapada por el periódico El Independiente hace tres días y de que Izquierda Unida haya pedido este martes la dimisión de Marlaska o el cese del responsable de adjudicar la compra de balas a una empresa de Israel.
El coordinador federal de IU, Antonio Maíllo, ha asegurado que o el ministro Marlaska «hace dimitir al responsable de esa licitación» que desobedece «la indicación del Gobierno», o debe «dimitir él mismo». En su opinión, esa compra de materia bélico «es gravísima» y contribuye a financiar empresas israelíes.