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La reunión que mantuvieron el Gobierno y el PP antes de la aprobación del primer real decreto ley

La reunión que mantuvieron el Gobierno y el PP antes de la aprobación del primer real decreto leyEFE

En mitad del polvorín

El Gobierno y el PP se dan un alto el fuego con la excusa de recomponer la «imagen de la política»

El cruce de acusaciones ha provocado gran malestar social. No hay un pacto, pero sí una preocupación compartida por socialistas y populares. Mientras, Vox, Sumar y Podemos piden dimisiones

«Habéis encendido la mecha en la ciudad de la pólvora», se leía en una de las pancartas de la multitudinaria manifestación que el sábado recorrió las calles de Valencia exigiendo responsabilidades políticas por la gestión de la DANA. Sobre todo al Gobierno de Carlos Mazón, pero también al de Pedro Sánchez.

El PSOE y el PP han captado el mensaje. El cruce de acusaciones entre la Administración central y la regional, la falta de asunción de responsabilidades en uno y otro lado mientras los afectados lloran a sus muertos o intentan rehacer sus vidas, ha provocado un enorme malestar social en la Comunidad Valenciana contra la política y los políticos.

En su rueda de prensa de este lunes en la Moncloa, el presidente se refirió a uno de los eslóganes que corre de boca en boca, de cuenta en cuenta, de televisión en televisión, en las dos últimas semanas. «Estamos viendo algunas campañas en redes sociales de que ‘solo el pueblo ayuda al pueblo’. El Estado somos todos», señaló, y se refirió a quienes pagan sus impuestos para que, en situaciones como ésta, el Estado pueda responder.

El bipartidismo se ha puesto de acuerdo para decretar un alto el fuego político en medio del polvorín valenciano, mientras Vox, Sumar y Podemos piden dimisiones. No hay un pacto de no agresión entre Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo, aclaran desde ambas partes a El Debate, sino un interés común en que el mensaje de la antipolítica no cale. «No hay lugar para mucho partidismo ante una catástrofe así, porque te pueden correr a gorrazos», reflexionan de forma gráfica desde Génova 13.

Desde el Gobierno y desde el PP se muestran preocupados por el mensaje de la antipolítica

En la reunión del comité de dirección del partido, Feijóo pidió a los suyos contención. De hecho, en su comparecencia de este lunes, el portavoz del PP habló de «reconstruir la deteriorada y dañada imagen de la política en España». Dijo más Borja Semper: «No vamos a practicar el acoso y derribo contra nuestros adversarios, no vamos a practicar el acoso y derribo contra el actual Gobierno. Somos plenamente conscientes de que si hubiera sido al revés probablemente no hubiéramos recibido este trato. No somos lo mismo y es lo que queremos evidenciar también en esta fase de reconstrucción y de recuperación», señaló.

Borja Sémper, durante la rueda de prensa de este lunes

Borja Sémper, durante la rueda de prensa de este lunesEFE

Minutos antes, Sánchez había evitado toda crítica a Mazón, y menos aún pedir su dimisión, en su comparecencia para anunciar el segundo real decreto ley con medidas para los damnificados. «El Gobierno está a lo que hay que estar. A reconstruir desde esta tragedia y relanzar la actividad económica y social aprendiendo la lección: estamos ante una emergencia climática que nos va a exigir lo mejor de nosotros mismos (…). Y posteriormente vendrá el debate político ante la asunción de responsabilidades políticas», afirmó el presidente.

No obstante, la prueba del algodón será la comparecencia del presidente valenciano el jueves en las Cortes regionales y la actitud que en ella mantengan los socialistas valencianos.

Reuniones previas

Antes de la aprobación de este segundo decreto ley, e igual que ocurrió con el primero la semana pasada, el ministro Félix Bolaños y el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rafael Simancas, se reunieron con los grupos parlamentarios para informarles. Con todos menos con Vox.

En el caso del PP, acudieron al encuentro -celebrado el domingo- el portavoz en el Congreso, Miguel Tellado, y el vicesecretario de Economía del partido, Juan Bravo. Tras esa reunión, el PP remitió varias propuestas a Bolaños para su incorporación en la norma que iba a aprobar el Consejo de Ministros ayer. Entre ellas, garantizar la gestión adecuada de los ERTE de fuerza mayor, permisos retribuidos y recibo de las prestaciones en plazo; línea de ayudas del Gobierno para la cobertura del 100 % de los gastos de emergencia de las comunidades; y que el Ministerio para la Transición Ecológica garantice el desarrollo de las actuaciones necesarias para recuperación de ríos y barrancos. Los populares no obtuvieron respuesta de la Moncloa, ni sí ni no. De manera que no sabrán si Sánchez ha accedido a incorporar alguna de sus peticiones hasta que este martes vean publicado el texto del decreto ley en el BOE.

No obstante, los de Feijóo ya han anunciado que van a facilitar la convalidación de ambos decretos leyes cuando el Gobierno los someta al Pleno del Congreso, que aún no hay fecha. Como mínimo, con una abstención. «Que el Gobierno no pierda el tiempo en buscar socios para esto, porque ya lo tiene», según fuentes del PP.

Mientras el Ejecutivo y el PP rebajan el tono, Vox, Sumar y Podemos lo suben. Los primeros, contra Pedro Sánchez; los dos últimos, contra Carlos Mazón. «Nosotros sabemos distinguir perfectamente entre lo que es la incompetencia y la negligencia criminal (...). Una catástrofe nacional exige una repuesta nacional, y aquí el único que tiene las competencias, tanto jurídicas como materiales, es el Gobierno de la nación. Sabemos quién es el gran culpable, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez», aseguró el portavoz de Vox, José Antonio Fúster.

Y en Sumar: «Mazón tiene que dimitir por su negligencia en la crisis de la DANA, por las vidas perdidas y destrozadas. Mazón tiene que dimitir o ser cesado. Nos hacemos cargo del clamor del pueblo valenciano», según su secretaria de Comunicación, Elizabeth Duval. Parecido mensaje salió este lunes de la sede de Podemos: «Nosotros pedimos la dimisión del negligente, del inepto Carlos Mazón por la gestión homicida que ha realizado. Cada minuto es un insulto a las víctimas y a los afectados», en palabras de su coportavoz, Pablo Fernández.

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