Diputado del PP en el Congreso de los Diputados
Un diputado del PP: «Esto ha sido un secuestro. Todo para mantener la agonía un Gobierno inviable»
El PSOE bloqueó la Comisión de Hacienda hasta que consiguió las votos para aprobar su hachazo fiscal. Para ello, impuso un receso sin límite de duración y alargó las negociaciones más allá de la media noche
El diputado del Partido Popular Santiago Rodríguez Serra condenó el retraso acumulado por la Comisión de Hacienda este lunes, que terminó poco antes de la una de la madrugada debido a las dificultades del PSOE para sacar adelante la votación y tras un receso que superó todos los límites previstos y deseables.
«Consideramos que ha sido una falta de respeto al conjunto de la Comisión, una falta de respeto al personal de la Cámara, a los trabajadores de la Cámara, una falta de respeto a los medios de comunicación y una degradación de la institución», comenzaba diciendo el diputado.
Una legislatura insostenible
El Gobierno salva su paquete fiscal de forma agónica en una jugada de trilero máxima
«Una suspensión por unos minutos no puede transformarse de ninguna manera en un secuestro de más de cuatro horas del conjunto de la Comisión, que es a lo que nos ha sometido la arbitrariedad de la presidencia de esta Comisión, que está única y exclusivamente al servicio del Gobierno y no al servicio de la propia Comisión. Todo para mantener la agonía, durante unos días, de un Gobierno que es absolutamente inviable», concluía Rodríguez Serra.
El retraso acumulado se debió a que, en vista de que el PSOE se encaminaba a una nueva derrota, el presidente de la Comisión, el socialista Alejandro Soler, paró la votación cuando estaba en marcha para dar tiempo al Ejecutivo a convencer in extremis a alguno de sus socios, ante la estupefacción y las protestas de todos los diputados, excepción hecha de los del PSOE.
En esos momentos se vio incluso a la diputada socialista Patricia Blanquer implorando a los diputados de ERC que apoyaran el paquete fiscal impulsado por el Ejecutivo, gesto que simboliza la precaria situación del PSOE para sacar adelante sus iniciativas parlamentarias.
Finalmente, Bildu, ERC y el BNG acordaron con el Gobierno prorrogar durante todo 2025 el impuesto a las energéticas, que María Jesús Montero previamente había pactado con el PNV y Junts suprimir. Tras ese ejercicio de equilibrismo parlamentario, el PSOE consiguió sacar adelante su paquete fiscal con 20 votos a favor y 17 en contra.
