Aldama pone en el radar del Supremo las 'mordidas' a Santos Cerdán y al jefe de gabinete de Montero

Desde que saliese de prisión, en libertad provisional, Víctor de Aldama no ha dejado de lanzar acusaciones que se extienden, como una mancha de aceite, en el seno del PSOE. El presunto líder de la «organización criminal» de compraventa irregular de material sanitario para el Gobierno, en plena pandemia, denunciaba ante el juez Ismael Moreno los pagos en efectivo que la trama hizo a varios nombres relevantes del Ejecutivo y volvía a confirmarlos de manera pública, a lo largo de varias entrevistas en medios de comunicación.

Dos millones de euros para el exministro de Transportes, José Luis Ábalos, 25.000 para el jefe de gabinete de la ministra de Hacienda María Jesús Montero, Carlos Moreno y 15.000 para el número dos de los socialistas, Santos Cerdán. Las anotaciones de Aldama les señalan y han puesto en el radar del Supremo, encargado de la investigación de los aforados, los pagos en efectivo.

Si para la Fiscalía Anticorrupción la confesión de Aldama ante el juez de la Audiencia Nacional fue suficiente para solicitar su salida de la cárcel, donde se encontraba de manera cautelar, en el Alto Tribunal podría servir para decretar la comparecencia de Cerdán y de Moreno, como mínimo como testigos o, incluso, como investigados si el magistrado Leopoldo Puente lo considera más adecuado para el caso.

No en vano, son varias las fuentes consultadas por El Debate que apuntan a la «notable penalidad» de unas afirmaciones que, por otra parte, podrían resultar auto inculpatorias para el propio Aldama. Pero en las que la clave judicial es la presunción de veracidad que se le dio a las mismas por parte de la Fiscalía, para instar con «no poca urgencia» la puesta en libertad del comisionista. Un hecho que, a ojos del instructor Puente, podría ser determinante a la hora de tomar futuras y eventuales decisiones.

Cabe recordar que fue el propio juez Ismael Moreno el que decretó el traslado de las declaraciones íntegras de Aldama en juzgado, a petición propia, a sus compañeros Santiago Pedraz, titular del Juzgado de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional; y, Leopoldo Puente en el Supremo. En el transcurso de las mismas, el empresario aseguró que el responsable de la entrega del dinero a Santos Cerdán fue Koldo García Izaguirre, imputado y ex asesor del también investigado José Luis Ábalos, en el Ministerio de Transportes.

De acuerdo con los detalles proporcionados por Aldama, la secuencia tuvo lugar en las inmediaciones de la calle Ferraz, donde se encuentra ubicada la sede nacional del PSOE. Los tres hombres se citaron en un bar cercano para realizar la operación. Una presunta 'recompensa' de la trama al número dos de los socialistas, designado secretario de organización tras la salida de Ábalos, con la que se le estaría contentando tras una presunta operación que habría invadido «el cupo» vasco que Santos Cerdán tenía asignado en la estructura.

Pagos al jefe de gabinete de Hacienda

«Llamar a Carlos Hacienda», «tomar algo con Carlos Hacienda», «temas varios Carlos de Hacienda» o «preguntar a Berlanga por Hacienda», fueron algunas de las anotaciones extraídas por los investigadores de la agenda incautada a Koldo, el pasado mes de febrero, durante las detenciones y registros. Unos apuntes que, tras la declaración de Aldama ante el juez cobran, todavía, más relevancia.

No en vano, tal y como publicó este diario en avance, la información intervenida al principal sospechoso de la presunta trama –encargada de enriquecerse ilícitamente con la venta de material sanitario en plena pandemia, entre los años 2020 a 2022, a través de la empresa Soluciones de Gestión– apuntaría a varios contactos de Koldo con el actual jefe de gabinete de la vicepresidenta primera del Gobierno y ministra de Hacienda María Jesús Montero, Carlos Moreno Medina.

El mismo hombre al que Aldama señala como beneficiario de una supuesta 'mordida' de 25.000 euros por sus gestiones a favor de una empresa que solicitó la mediación del comisionista para lograr el aplazamiento de una deuda tributaria y sortear, así, el embargo que estaba a punto de acordarse sobre la misma.

Una variable que, junto con las afirmaciones vertidas por Aldama ampliaría el foco del Supremo hacia el Departamento que lidera Montero, además del de Transportes, e incluso Interior que, han sido señalados de manera inequívoca por varios de los testigos e investigados a los que el juez Ismael Moreno ya ha tomado declaración en el marco de la instrucción del caso y que, además, habrían comparecido antes o después en la comisión de investigación que se sigue en el Senado.