La obra de José de Mora será trasladada y restaurada en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico

La Hermandad del Silencio de Granada se fundó en el año 1924 y, desde sus orígenes, ha procesionado la imagen crucificada del Santísimo Cristo de la Misericordia, que talló en el siglo XVII José de Mora. El artista hizo esta talla en su casa del Albaicín, hoy denominada «Carmen de los Mascarone», que se ha convertido en un ejemplo y paradigma de la perfección escultórica de la escuela barroca granadina.

Este año, la cofradía del Silencio ha obtenido la autorización del Arzobispado de Granada para que la imagen de Mora, datada en el año 1688, pueda ser restaurada en el Instituto Andaluz de Patrimonio Histórico, situado en Sevilla. El traslado se llevará a cabo este miércoles 10 de julio, según ha confirmado la propia hermandad.

La primera fase de restauración de la talla comenzó el pasado mes de febrero, cuando la propia cofradía solicitó a la Junta conocer el estado en el que se encontraba la escultura y la cruz, a través de un examen pormenorizado. El laboratorio móvil del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico se desplazó hasta la iglesia de San José de Granada, para realizar in situ los análisis científicos de la imagen. Los resultados arrojaron datos reveladores sobre la temperatura, humedad relativa y carga microbiológica del entorno en el que se conserva la imagen del Cristo de la Misericordia.

Esta semana comenzará la segunda fase de restauración de la imagen del Santísimo Cristo de la Misericordia, en las instalaciones específicas de la sede central del Instituto en Sevilla, después de conocer los resultados obtenidos en la primera fase. Allí se le efectuarán radiografías y será sometido a un TAC, para continuar con su proceso de conservación.

Encargo de Juan de la Barreda

El Cristo de la Misericordia fue encargado a Mora por la familia del abogado de la Real Chancillería Juan de la Barreda, en 1688, por 2.000 reales. Como pago complementario, el artista recibió de los Clérigos Regulares Menores de San Francisco Caracciolo, seis pinturas «de gran valor».

La Desamortización de Mendizábal, en el siglo XIX, estuvo a punto de provocar el traspaso de la imagen a manos privadas. Sin embargo, el párroco de la iglesia de San José aprovechó este periodo de dos años, que tuvo la Junta de Bienes Nacionales para realizar el inventario de los bienes de los conventos expropiados, para que el Cristo de la Misericordia pasase a su templo, donde ahora es venerado.

La imagen del crucificado comenzó a ser procesionada tras la retirada de las tropas francesas de Granada, pero actualmente procesiona una copia realizada por Barbero Gor. La imagen original de José de Mora, que está siendo restaurada, preside una capilla en la iglesia de San José, remodelada hace dos décadas con la colaboración de la Duquesa de Alba.