Jaén, la provincia de los castillos: aquí se encuentra el más antiguo de España
Su antigüedad supera el milenio, toda vez que se construyó en el año 968 d. C.
España cuenta con alrededor de 10.000 castillos, según la Asociación Española de Amigos de los Castillos. Algunos se encuentran en ruinas, mientras que otros han sido restaurados minuciosamente y convertidos en museos o incluso en alojamientos. Jaén es la provincia con mayor número de fortificaciones, un total de 237, entre castillos (97), torres, atalayas o búnkeres (126) y murallas o castros (14). Además, alberga el castillo más antiguo de España.
Se trata del castillo de Baños de la Encima, también conocido como de Burgalimar, en árabe Bury al-Hammam. Se ubica en lo alto del Cerro del Cueto, en el antiguo camino del Puerto del Muradal, usado antes que Despeñaperros, durante el siglo XVIII, como paso entre Castilla-La Mancha y Andalucía. Su antigüedad supera el milenio, toda vez que se construyó en el año 968 d. C.
El califa cordobés Al-Hakam II, hijo y sucesor de Abderramán III, mandó la construcción del castillo allá por el siglo X. Esta información ha llegado hasta nuestros días gracias a una inscripción histórica en árabe que puede verse sobre su puerta, aunque la original fue trasladada al Museo Arqueológico Nacional, en Madrid. Esta inscripción menciona al califa y al gobernador militar Maysur Benalhacam como responsables de la construcción del castillo.
Burgalimar fue diseñado como una fortaleza impenetrable con una arquitectura militar avanzada para la época. Se rodeó de murallas y torres de vigilancia para protegerlo de posibles ataques. Durante el periodo de dominio musulmán, el castillo tuvo un papel crucial en la defensa de la zona y fue testigo de numerosos conflictos y batallas.
Reconquista y cambio de manos
Durante la Reconquista, el castillo de Baños de la Encina cambió de manos en múltiples ocasiones. En 1147 lo tomó Alfonso VII, pero tras su muerte volvió al dominio musulmán. En 1189, las tropas de Alfonso VIII de Castilla y Alfonso IX de León lo hicieron suyo de nuevo, pero no lograron retenerlo por mucho tiempo.
En 1212, tras la famosa batalla de las Navas de Tolosa, cuando los monarcas cristianos Alfonso VIII, Pedro II de Aragón y Sancho el Fuerte de Navarra tomaron el control. Sin embargo, no fue hasta 1225, bajo el reinado de Fernando III, cuando se produjo la conquista definitiva por parte de la Corona de Castilla.
En los siglos XV y XVI, Burgalimar jugó un papel clave en los conflictos internos entre nobles y la monarquía. Durante el reinado de Enrique IV, el castillo fue testigo de los continuos enfrentamientos entre los partidarios del rey y los maestres de la Orden de Calatrava y de la Orden de Santiago, simpatizantes del príncipe Alfonso.
Durante la guerra de la Independencia española, el castillo de Baños de la Encina fue ocupado por las tropas napoleónicas, lo que provocó cambios significativos en el recinto, ya que el patio de la fortaleza se utilizó como cementerio parroquial hasta el año 1828.
El castillo de Burgalimar fue declarado monumento nacional histórico-artístico en 1931, lo que ha contribuido a su conservación y restauración. Además, en 1969, la Comisión Europea otorgó a la fortaleza el honor de ondear la bandera azul del Consejo de Europa, un privilegio que se le concedió con motivo del milenio de su construcción y que solo comparte con el Palazzo Vecchio de Florencia. También forma parte del Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz.