Cultura, tradición y turismo: Jerez cuelga el cartel de 'completo' para este puente al calor de las zambombas

Las zambombas de Jerez de la Frontera, catalogadas como bien de interés cultural (BIC) por la Junta de Andalucía desde 2015, son el atractivo más esperado de la Navidad jerezana. De hecho, durante este puente de la Constitución y la Inmaculada llenará calles y plazas de villancicos, habida cuenta de que hay programadas más de 50 zambombas durante estos cuatro días festivos.

Estos festejos tan tradicionales de la localidad llenan cada vez más las calles de vecinos y visitantes que tienen curiosidad por esta forma de entender la Navidad, entonando villancicos alrededor de una candela y con el instrumento que da nombre a esta reunión como pieza central. Tal es la expectación que generan que el Ayuntamiento de Jerez ha ampliado este año en una semana el periodo oficial de zambombas, que comenzó el pasado 22 de noviembre.

De esta manera, entre el viernes 6 y el lunes 9 de diciembre, Jerez va a acoger algo más de medio centenar de zambombas. Muchas de ellas son organizadas por hermandades de la ciudad y, salvo contadas excepciones, suelen celebrarse a las puertas de las iglesias desde las que salen en procesión en Semana Santa. A ellas se sumarán las que suelen montar algunos bares y pubs.

La zambomba de Jerez de la Frontera es una tradición profundamente enraizada en la cultura andaluza, que combina música, canto y convivencia en torno a la Navidad. De hecho, el periodo de zambombas acaba siempre en la mañana del 24 de diciembre, cuando los jerezanos se echan a la calle para cantar los últimos villancicos antes de cenar con sus familias.

Sus raíces se remontan al ámbito rural, cuando los vecinos se reunían en los patios y corrales para compartir villancicos al calor de una hoguera. Este encuentro espontáneo de vecinos se ha transformado con el tiempo en una celebración que cada año gana en seguimiento, y no solo cuenta con impacto en las poblaciones que las acogen, sino que extiende su ámbito de influencia incluso a nivel internacional.

Gran impacto en el turismo local

En la última década, la fiesta ha trascendido el interés cultural y festivo para convertirse en un acontecimiento de gran impacto en el turismo local y con importantes repercusiones socioeconómicas en la comarca, lo que en buena medida justifica el apoyo que instituciones públicas y empresas privadas han conferido a la fiesta.

De hecho, en Jerez de la Frontera se prevé una ocupación hotelera que supere el 90 % en los días centrales del puente de la Constitución y la Inmaculada. Según datos de Horeca Cádiz, para la jornada de viernes y sábado, la previsión actual es superar el 91 % de ocupación, mientras que en las jornadas de jueves y domingo superará el 70 %, concretamente en la del domingo con más del 75 %.

El Ayuntamiento de Jerez ha adoptado para este puente festivo medidas de refuerzo de los operativos de seguridad, tráfico y limpieza ante la masiva afluencia de personas que se espera por la celebración de muchas zambombas, que dejará en la ciudad «un lleno total». En declaraciones a los medios, la alcaldesa, María José García-Pelayo, ha comentado que se han tomado decisiones para «minimizar todas las situaciones de desbordamiento que se produjeron el año pasado».

Ordenanza sobre zambombas

Por otro lado, el Gobierno municipal comenzará a trabajar después de las fiestas navideñas en una ordenanza que regule la celebración de zambombas en la ciudad con el objetivo de «proteger la esencia» de esta tradición jerezana y su valor patrimonial.

Estos trabajos se realizarán de manera transversal, contando para ello con la implicación de seis delegaciones municipales coordinadas por Cultura y Fiestas, y desde «la más amplia participación social», en palabras de la alcaldesa.

Así las cosas, tras la Navidad se abrirá un periodo de consultas en el que la ciudadanía podrá trasladar al Ayuntamiento, a través de los cauces correctos, lo que consideren que se debería incluir en estas ordenanzas específicas para regular las zambombas en la localidad.