Entrevista
José Manuel Fernández, alcalde de Manilva: «El silencio es lo que crea el efecto llamada de las narcolanchas»
El regidor de esta localidad malagueña, limítrofe con la provincia de Cádiz, cree que «mirar hacia otro lado no es una opción» y exige a Marlaska que dote a la Guardia Civil de «más medios materiales y humanos»
El actual alcalde de Manilva (Málaga, pero limítrofe con la provincia de Cádiz, 18.000 habitantes), José Manuel Fernández (PP) tiene claro que, ante los problemas de seguridad, no se puede mirar hacia otro lado.
Radicalmente opuesto a aquellos que defienden la tesis de ocultar o tapar una noticia negativa para evitar que sus posibles consecuencias salpiquen al pueblo, Fernández no tuvo reparos en aceptar su presencia en todos los medios que le requirieron en pleno Jueves Santo para denunciar tanto la presencia de once narcolanchas frente a las costas del municipio como la falta de medios de la Guardia Civil para enfrentarse a ellas. «El silencio es el que crea en verdad el efecto llamada».
El regidor de esta bella localidad de la Costa del Sol Occidental, famosa por su uva y sus vinos, considera que lo que frente a sus playas sucedió fue más bien un hecho puntual que coyuntural, pero ante la posibilidad de que el tráfico de drogas se desplace desde Campo de Gibraltar hacia el este, aboga por dar respuestas ante el problema y critica la gestión del Ministerio del Interior y de Fernando Grande-Marlaska en esta crisis.
Fernández recibe a El Debate en su despacho en el Ayuntamiento de Manilva en un día donde, precisamente, tiene previsto reunirse con Jucil (sindicato mayoritario dentro de la Guardia Civil).
La Guardia Civil no puede seguir trabajando con los medios que tiene: es como poner a competir Seiscientos contra FerrarisAlcalde de Manilva
–¿Existe preocupación por que el problema del narcotráfico se desplace hacia esta zona?
–Ese riesgo existe siempre: la presión que se ejerce desde Algeciras obliga a los narcos a buscar nuevos caladeros y pueden elegir esta costa u otras. Manilva no destaca por eso, pero tuvimos que vivir ese momento puntual con esas once narcolanchas o como el pasado domingo, cuando otras dos estaban en el Puerto de La Duquesa perfectamente visibles a las 3 de la tarde. Pero no es algo que vivamos cotidianamente aquí.
–¿Por qué decidió optar por la visibilidad en cuanto tuvo constancia de lo que sucedía?
–Creo que cualquier responsable público tiene dos opciones ante una situación así: mirar hacia otro lado o denunciarla. Entendí que mi obligación entendí era notificar lo que sucedía a la Comandancia de la Guardia Civil y a partir de ahí decido hacer un llamamiento para que se solucione una estampa tan dañina para nuestro municipio como para el turismo, y más en aquellos días.
–¿Cómo ha sido la gestión del Gobierno desde el asesinato de los dos guardias civiles de Barbate hasta el episodio que se vivió en Manilva, donde una narcolancha embistió a una patrullera?
–Lo dije aquellos días y lo digo ahora. La Guardia Civil no puede seguir trabajando con los medios que tiene: es como poner a competir Seiscientos contra Ferraris porque llegan tarde, mal y poniendo en riesgo sus vidas. Reclamo más medios humanos y materiales y por supuesto, desde mi punto de vista, la gestión de Marlaska ha sido nefasta. Debería dimitir.
–Se acerca el verano y la temporada fuerte turística, ¿hay prevista alguna acción conjunta de los municipios de la zona?
–Soy a su vez portavoz del equipo de Gobierno de la Mancomunidad de la Costa del Sol Occidental y desde ese organismo, que agrupa a 11 municipios de la zona, ya hemos hablado de coordinar medidas conjuntas y de dirigirnos a los organismos competentes, como es en este caso la Subdelegación del Gobierno.
Antes de mirar hacia otro lado, prefiero denunciar estas situaciones pese a sus posibles repercusionesAlcalde de Manilva
–¿Cómo es el sentir de la Guardia Civil?
–Es triste que, a pesar de su gran trabajo, te digan que no tienen medios y que además, se sienten avergonzados por no poder dar respuesta a este tipo de solicitudes de los municipios frente a actividades delictivas.
–¿Qué expectativas le aguardan a Manilva?
–Como decía al principio, hay partidos que creen que ante estas cosas hay que mirar hacia otro lado por la imagen negativa que crea de un municipio. Yo entiendo precisamente lo contrario. Manilva vive estas situaciones de forma puntual, pero es importante no bajar la guardia e implementar esos medios tan necesarios. Después de más de 30 años donde hemos perdido el tren de la modernidad, aspiramos a colocar este municipio donde se merece, en la primera línea de la excelencia turística, al igual que lo han logrado otros municipios de la Costa del Sol. Contamos con 9 kilómetros de playa, algunos de ellos vírgenes y que son reserva biológica. Son nuestros vinos y nuestros viñedos. Y nuestra cultura, como los restos fenicios, el Castillo de la Duquesa y sobre todo, la joya de la corona, el Puerto de la Duquesa.
Un puesto principal que no es tal
Su preocupación pasa ahora por lograr, de facto, el puesto principal de la Guardia Civil para Manilva, una reivindicación histórica. «Tenemos el título y la concesión, pero en la práctica no existen ni el edificio ni los agentes para corroborarlo. No hay un euro, por lo que el Ayuntamiento debería asumir su coste. ¿Acaso este es el Ministerio de Interior que nos merecemos? ¿Es que yo como alcalde tengo que detraer de los servicios que he de prestar a mis vecinos los dos millones que puede costar el nuevo cuartel? Estamos dispuestos a poner una parte, pero el Gobierno debe cumplir con la suya», finaliza.