Casa Real  «El Rey ha contribuido de forma decisiva a nuestra prosperidad compartida»

El Instituto de España, que integra las diez principales reales academias de España, ha clausurado este jueves su ciclo interacadémico de 2025, que ha estado dedicado a analizar los diez años del reinado de Felipe VI desde las perspectivas científica, humanística y jurídica.

En la última sesión se abordaron los avances registrados en la década 2014-2014 en los ámbitos de la ingeniería, los medicamentos, donde España se ha situado en el segundo país del mundo en la realización de ensayos clínicos, y la economía, con las ponencias de Rosa Basante, de la Real Academia Nacional de Farmacia; el presidente de la Real Academia de Ingeniería, Jaime Domínguez Abascal, y Ana María Gil Lafuente, de la Real Academia de Ciencias Económicas y Financieras. La sesión fue clausurada por Manuel Pizarro, presidente del Instituto de España y de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación de España.

Todos vinieron a coincidir en que se ha sido una década donde España ha experimentado avances notables en esas áreas. Así, por ejemplo, Ana María Gil Lafuente, catedrática de Economía Financiera de la Universidad de Barcelona, destacó el papel desempeñado por el Rey en el crecimiento notable de la economía española, como se puede constatar con los datos relativos al PIB, renta per cápita y esperanza de vida: «Felipe VI ha contribuido de forma decisiva a nuestra prosperidad compartida», y la Monarquía española en esta década, como demuestra la evolución del ciclo económico, se ha convertido «en sólido garante de nuestra estabilidad jurídica-normativa, dando así al inversor global el marco de consistencia temporal que nos ha permitido seguir progresando».

Crecimiento económico

El crecimiento económico que se ha experimentado durante la década del reinado de Felipe VI no se hubiese podido lograr, añadió Ana María Gil Lafuente, sin una «predictibilidad económica y la consistencia temporal que han brindado a nuestra economía nuestras instituciones, y singularmente nuestra monarquía constitucional».

Por su parte, Jaime Domínguez Abascal, catedrático de la Universidad de Sevilla, sostuvo que en esta década nuestro país ha experimentado una «transformación radical» en el área de la ingeniería: «España ha sido pionera en el despliegue de redes de alta velocidad y tecnologías de conectividad». Igual reflexión realizó respecto al sector aeroespacial, donde España, afirmó, «puede decirse que está a la cabeza del desarrollo tecnológico».

De 50 a más de 110.000 drones

Relacionado con este último aspecto, Domínguez Abascal aludió a la «revolución» que se ha registrado en el campo de los drones comerciales, con aplicaciones que van desde la agricultura a la inspección de infraestructuras o la seguridad y vigilancia. «Un dato clarificador de esta revolución es que mientras que mientras en 2014 había 50 operadores de drones registrados en nuestro país -conocidos como “taxistas de drones»-, en 2024 el número alcanzaba los 110.000".

En cuanto a los avances legislativos y sociales relacionados con los medicamentos, Rosa Basante destacó la «buena implantación de investigación clínica en España en esta pasada década», donde gracias a ella se ha registrados importantes ventajas: «En primer lugar, para el paciente, que puede acceder al tratamiento de manera muy precoz, en segundo lugar para el profesional sanitario, que debe estar a la vanguardia del conocimiento y, en tercer lugar, para el sistema sanitario, público o privado, para las instituciones».

Segundo país en ensayos clínicos

Relacionado con esos avances, destacó cómo se ha producido «un incremento sustancial de la calidad y cantidad de ensayos clínicos, hasta el punto de que nuestro país es en estos momentos “el número dos, tras Estados Unidos». Pero, junto a todo ello, la académica de advirtió del problema de la falsificación de medicamentos, «fenómeno creciente y cada vez más preocupante por lo que implica para la salud pública».