Casa Real  La Reina centra su agenda de trabajo en los sectores más vulnerables

La Reina está centrando, cada vez más, su agenda en los sectores más vulnerables de la sociedad. Cuando no acompaña al Rey, la mayoría de los actos a los que asiste consisten precisamente en visitas o reuniones con grupos de personas que necesitan una atención especial, algún tipo de ayuda o de reconocimiento. Pero también junto a Don Felipe ha llevado la cercanía y el afecto de la Corona a muchas personas que lo están pasando mal, o muy mal, como son los afectados por la catástrofe de la dana.

Fue precisamente en la visita al municipio valenciano de Paiporta, en plena protesta de los indignados vecinos, cuando muchos pudieron conocer el lado más humano de la Reina. Al margen de todo protocolo, manchada de barro, espantada ante la tragedia y sin poder contener las lágrimas, la imagen de Doña Letizia creció ese día ante los españoles.

En un momento tan tenso e inseguro -uno de sus escoltas resultó herido en la frente-, se habría comprendido que la Reina se hubiera retirado; pero ella ni se lo planteó, y se negó a dejar solo al Rey cuando sus colaboradores intentaron dirigirla al vehículo. Desde entonces, ha vuelto a Valencia en seis ocasiones, todas ellas relacionadas con las personas afectadas por la catástrofe de la dana. Y se ha reunido en dos ocasiones con las entidades sociales que trabajan con ellas, como son Cáritas o Cruz Roja.

Huérfanos, enfermos y víctimas

Pero también el resto de sus actividades están muy enfocadas en los sectores vulnerables. Esta semana Doña Letizia ha abierto las puertas del Palacio de La Zarzuela a tres grupos muy especiales de españoles: niños huérfanos de madres asesinadas por sus maridos o parejas, personas sordociegas y víctimas del terrorismo. A todos ellos les ha recibido en audiencia, les ha escuchado, se ha interesado por sus problemas y les ha mostrado cercanía y cariño.

Desde que empezó el año, su agenda de trabajo está llena de este tipo de actividades solidarias con quienes más apoyo necesitan. Uno de los grupos que más agradece el apoyo de la Reina es el de las personas con enfermedades raras, a quienes acompañó a principios de marzo en Oviedo. Para Doña Letizia, estar con ellas «es una prioridad».

Altavoz de los afectados

Ella no solo escucha y comparte el dolor de las madres de niños con patologías raras, poniendo nombres a cada una de las enfermedades, sino que se ha convertido en su altavoz a la hora de pedir más investigación, más acceso a los tratamientos, atención para los cuidadores, agilización de diagnósticos... Lo que sea para que mejoren sus condiciones de vida.

También ha asistido a reuniones de trabajo con la Asociación Española contra el Cáncer, con fundaciones de microcréditos, con Unicef España, con los mayores de 65 años o con la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción. Y ha visitado el Hospital Nacional de Parapléjicos, donde estuvo escuchando las historias de dolor y de superación de muchos de los pacientes. «Me quedaría todo el día hablando contigo», le dijo a uno de ellos.

La misionera de Cabo Verde

La próxima semana la Reina va a realizar un viaje de Cooperación Española a Cabo Verde, donde visitará los proyectos financiados por la solidaridad española. Entre ellos, la misión de la religiosa Milagros García, miembro de la Congregación de Adoratrices, que ha transformado la vida de muchas mujeres con su proyecto Kreditá na bo (cree en ti).

Este proyecto, fundado por las Adoratrices en 2009, cuenta con un centro de día que apoya a mujeres en situación de riesgo y víctimas de explotación sexual, y las ofrece formación de corte y costura, cocina, informática, alfabetización y agricultura. Doña Letizia partirá el lunes por la tarde y regresará el jueves tras visitar algunos proyectos en las islas de Santiago y San Vicente.