El abogado de Puigdemont reconoce que participó en la ley de amnistía: «Aquí no se trata de qué palabras son de uno o de otro»
Gonzalo Boye asegura que la norma «va a resistir el paso del tiempo y el peso de las cuestiones prejudiciales o inconstitucionales»
El abogado de Carles Puigdemont, Gonzalo Boye, ha reconocido en el Senado que participó en la redacción de la ley de amnistía, de la que ha señalado que es «buena técnicamente» y «va a resistir el paso del tiempo y el peso de las cuestiones prejudiciales o inconstitucionales» que puedan plantear los jueces ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) o el Tribunal Constitucional (TC).
Lo ha expresado en su comparecencia en la Comisión Constitucional y de Justicia de la Cámara Alta para informar sobre la proposición de ley de amnistía, que se encuentra en tramitación después de que el 14 de marzo el Congreso le diera el visto bueno. Boye ha insistido en su intervención en que la norma es «buena para todos».
Ha subrayado que la amnistía se delimita en un plazo temporal y en unos hechos y que «se ha cuidado de forma exquisita» que la norma no fuese «autoaplicativa» para que se respetase «en todo momento» la separación de poderes; es decir, que el texto no sea de aplicación automática sino que sean los jueces quienes tengan que estudiar cada caso y aplicarla. Sobre este punto, el letrado ha asegurado además que la Comisión de Venecia dijo que «no existe ningún problema de separación de poderes» y que tampoco hay inconveniente con el principio de igualdad.
A su juicio, «no es achacable ninguna insuficiencia técnica». «En mi opinión, puedo decirles que estoy convencido de que esta es una buena ley, que resistirá el paso del tiempo como el peso de cualquier cuestión prejudicial o de inconstitucional», ha expresado Boye.
En el turno de los grupos parlamentarios, el senador del PP Antonio Silván ha preguntado a Boye, a quien ha señalado como el autor intelectual y negociador de la amnistía, cuáles fueron las aportaciones concretas de Junts a la ley y a las últimas enmiendas. También le ha preguntado si Puigdemont está «confiado» con la redacción final de la norma. El letrado le ha contestado que «aquí no se trata de qué palabras o qué frases son de uno o de otro, sino que se trata de que el texto legal tenga una coherencia» en la que todos se reconozcan en la norma.