La Iglesia de Barcelona denuncia que una de cada cuatro familias de la diócesis vive en condiciones indignas

La Iglesia de Barcelona denuncia que 120.000 familias con niños y adolescentes de la archidiócesis –aproximadamente, una de cada cuatro– vive en hogares inadecuados, que presentan condiciones de insalubridad, hacinamiento, deficiencias graves o falta de acceso a suministros.

Así se desprende del Informe Foessa 2025, presentado este miércoles. Según los datos del estudio, se encuentran en esta situación el 15,9% de la población total, el 24,6% de las familias con hijos y el 46,2% de la población excluida. Además, un 26,6% de los habitantes de la diócesis tienen dificultades ligadas al acceso y mantenimiento de la vivienda, un porcentaje que sube al 41% en el caso de las familias y al 85,2% en el de la población excluida.

Así lo ha presentado la jefa de análisis social e incidencia de Cáritas Barcelona, Miriam Feu, para quien las dificultades para empadronarse y la elevada rotación «causan inseguridad en la vivienda». Feu también destaca que 415.000 personas en la diócesis de Barcelona están en situación de pobreza severa tras hacer frente a los gastos de vivienda: “La exclusión residencial se ha convertido en una emergencia social para la población más vulnerable", ha lamentado.

La respuesta de Cáritas

Por su parte, el director de Cáritas Barcelona, Eduard Sala, ha planteado las propuestas de Cáritas frente al desafío, entre las que están desplegar la vivienda social de emergencia, tal y como prevé la Ley 12/2023; aprobar la proposición de ley para erradicar el sinhogarismo, y reforzar iniciativas para aumentar los alquileres asequibles.

Sala también ha puesto en valor el compromiso de la entidad con esta emergencia: en 2023 atendió a unas 2.000 personas en esta situación, con 396 pisos unifamiliares y 27 pisos compartidos. Y ha hecho un llamamiento a la Generalitat y los ayuntaimentos a garantizar un parque «sólido y estable» de vivienda social de alquiler, así como movilizar pisos vacíos, recuperar pisos turísticos sin licencia y cambiar usos para priorizar el residencial.

En esta línea, Sala ha añadido que se está coordinando con las administraciones el cambio de uso de equipamientos de la diócesis para dar una solución habitacional a las personas en esta situación: «Se está estudiando». El obispo auxiliar de Barcelona, Javier Vilanova, ha señalado que este cambio de usos depende de la «voluntad política de los ayuntamientos».

La secretaria general de Cáritas Barcelona, Cristina Garcia, ha explicado que para esta Navidad se ha impulsado una campaña, con el lema «Haz que un hogar digno no sea una carta a los Reyes», para reivindicar una vivienda digna para todos los niños, ya que un hogar «es mucho más que cuatro paredes y un techo».