Elecciones 28M Carlos Mazón: «En la Comunidad Valenciana hay un 'procés' que hay que parar de forma inmediata»
El candidato del Partido Popular a la presidencia de la Generalitat ve «ganas crecientes de cambio» en unas elecciones que servirán para sacar «tarjeta roja a Puig y amarilla a Sánchez»
Para el Partido Popular, la Comunidad Valenciana es uno de sus feudos electorales más importantes. En la región se fraguaron los posteriores triunfos de José María Aznar y Mariano Rajoy. A finales de año, Alberto Núñez Feijóo asumirá el mismo reto y para ello necesita que las tres provincias valencianas se tiñan de azul PP el próximo 28 de mayo y así recuperar la Generalitat.
El elegido para ello es Carlos Mazón, quien, en un contexto en el que percibe «ganas de cambio crecientes», atiende a El Debate a menos de tres meses para las elecciones autonómicas.
–Quedan 83 días para las elecciones autonómicas. ¿Qué sensaciones tiene?
–Percibo ganas de cambio crecientes y casi urgentes. También veo indignación con una situación que ya llega a su fin, de falta de defensa de los servicios públicos y de los intereses de nuestra tierra. Pero a la vez percibo ilusión por un cambio a mejor, por hacer las cosas de otra manera. Eso es lo que nos da mucha energía y mucha fuerza para esta última etapa de la precampaña.
–Las encuestas apuntan que usted podría gobernar la Generalitat con un hipotético pacto con Vox. ¿Qué medidas serían las primeras que tomaría?
–Un gran refuerzo urgente de la Sanidad pública como principal objetivo, la aplicación de la reforma fiscal con prioridad en las personas con salarios más bajos y la supresión de los impuestos ideológicos como la tasa turística o a los vehículos de tracción mecánica. Aprobaremos una ley de Libertad Educativa con el refuerzo a la figura del profesor y el plan de salud mental, que es urgente sobre todo para nuestros adolescentes y nuestros mayores.
–El Gobierno valenciano ha eliminado la segunda lectura a la hora de diagnosticar el cáncer de mama por falta de profesionales. ¿Cómo valora este hecho en particular y la gestión sanitaria en particular?
–Podría hacer política de frente con esta cuestión. Podría pedir ceses, dimisiones, comisiones de investigación y exigir medidas políticas. Pero no lo voy a hacer. De verdad le digo que hemos llegado a un punto con la Sanidad en la Comunidad Valenciana que eliminar la segunda lectura en las pruebas de cáncer de mama es el símbolo del fracaso de Ximo Puig. Lo que hay que hacer es priorizar los importante. Imploro y suplico para que se revierta esa decisión de manera inmediata. Lo suplico por el bien de las mujeres. Puig tiene que reaccionar porque es un asunto muy grave y muy serio. Lo mínimo que se puede hacer es rectificar.
Líneas rojas para pactar
–Si usted el 28 de mayo puede desbancar a Puig, ¿cuáles serían sus líneas rojas a la hora de pactar?
–Las de la defensa de mi tierra, el refuerzo de los servicios públicos, la bajada de impuestos, la defensa del agua que nos merecemos, la de la libertad educativa, las políticas sociales, nuestro autogobierno… Mis líneas rojas son todas aquellas que puedan perjudicar o no beneficiar lo suficiente a la Comunidad Valenciana, siempre teniendo en cuenta nuestros principios.
–De un tiempo a esta parte le hemos visto con Alberto Núñez Feijóo y otros miembros de la Dirección Nacional del PP. ¿Por qué cree que Génova tiene marcadas en rojo las elecciones en la Comunidad?
–Porque la Comunidad Valenciana es fundamental para España. Se trata de sacarle tarjeta roja a Ximo Puig, pero también amarilla a Pedro Sánchez. Tenemos que explicar a la gente de qué va el cambio y la Comunidad tiene la fuerza y la capacidad suficientes para explicar lo que quiere hacer el Partido Popular en esta nueva etapa. La valenciana es una prioridad. Eso es una mayor presión y un mayor reto, pero lo asumo encantado. Esta Comunidad tiene que acostumbrarse a jugar en las grandes ligas y no en los puestos bajos. Recojo el guante de la prioridad de la Comunidad Valenciana y lo asumo de frente.
–Muestra de esa derivada nacional es que está previsto que Núñez Feijóo visite las Fallas, pero no así Pedro Sánchez. ¿A qué cree que se debe esa diferencia?
–A que mientras uno se ha olvidado de la Comunidad Valenciana, la desprecia y su delegado aquí, Ximo Puig, ha dejado de reivindicar por la región, tenemos justo el modelo contrario. Es el de una apuesta por la Comunidad, donde el PP reclama atención en unos asuntos que son urgentes y prioritarios.
«El 8 de marzo el PSOE, Compromís y Podemos tienen una magnífica ocasión para pedir perdón a las mujeres»
–¿Cuál cree que es el papel de Ximo Puig en el caso Azud?
–A nadie le cabe ninguna duda de que el caso Azud es el caso Puig. Hemos visto cómo la trama le pagaba sus campañas electorales y no se ha desmentido. También cómo el tesorero del PSPV-PSOE y gran amigo de Puig tiene gravísimas anotaciones y tampoco se ha desmentido. Se han publicado mordidas dramáticas, cómo todo el Partido Socialista apostaba por las desaladoras, que son muy perjudiciales para el Medio Ambiente, con el resultado de mordidas multimillonarias. Y otro amigo de Puig, Manolo Mata, dejaba la portavocía del PSPV-PSOE para irse a defender al cabecilla de la trama. Puig está rodeado por Azud.
–Y como todo puede empeorar, ahora los titulares los copa un tal 'Tito Berni'. ¿Qué opinión le merece lo que estamos conociendo?
–Mi opinión no difiere un ápice de la del resto de los españoles. Cuando un partido se niega a dar explicaciones sobre asuntos tan graves es porque ni siquiera ellos se atreven a confesar la profundidad del asunto. Estamos todos consternados por lo que estamos viendo, pero a la vez estamos convencidos de que, desgraciadamente, vamos a sufrir algún otro bochorno socialista en los próximos días. Nadie del Gobierno, una vez más, da explicaciones.
–¿Por qué cree que el caso Azud no está teniendo la relevancia mediática que un asunto de tal gravedad merecería?
–Vemos muchos esfuerzos del Partido Socialista por tapar Azud, como los hemos visto con lo del hermano de Puig. El propio presidente lleva un año paralizando informes que tiene que aportar a la causa para que no se sepan. Lo mismo sucedió con el caso Oltra, en el que hay catorce imputados en la Consejería por taparlo. Cuando se ponen a tapar cosas son imbatibles, pero la verdad acabará resplandeciendo, sin duda.
–Compromís sí apoya en Madrid la comisión de investigación sobre el caso Mediador, pero en Valencia se ha opuesto a todas…
–Compromís va a tener que dar muchas explicaciones a los valencianos. En primer lugar, porque ha aprobado los peores Presupuestos Generales del Estado para la Comunidad Valenciana. En segundo término, porque no ha defendido el agua que merecemos. También tiene que explicar por qué tiene catorce imputados por tapar el presunto encubrimiento de los abusos sexuales del exmarido de Mónica Oltra. ¿Por qué está en contra de la ampliación del puerto de Valencia? ¿Por qué está politizando la Educación en la Comunidad Valenciana? ¿Por qué tiene un imputado dándole subvenciones al hermano de Puig?
«El caso del ‘Tito Berni’ es tan grave que ni siquiera el PSOE se atreve a confesar la profundidad del asunto»
–Hace unos meses el Gobierno derogó el delito de sedición y rebajó el de malversación. ¿Qué opinión tiene y cómo cree que puede afectar a implicados en el caso Azud u otros similares?
–Ya vimos que algo iba a pasar cuando Puig fue el primero en aplaudir los indultos a los separatistas catalanes. Le faltó tiempo. También lo hizo con la rebaja de la malversación y la eliminación de la sedición. Es el primero en callarse frente a los más de cincuenta violadores beneficiados por la ley del 'solo sí es sí' en la Comunidad Valenciana. Fue el primero en hablar de un territorio común entre la Comunidad, Baleares y Cataluña. No hay nada nuevo bajo el sol. Siguen siendo los mismos amigos de los 'Países Catalanes', a los que les ha dado diez millones de euros de todos los valencianos. Hay suficientes pruebas de que en la Comunidad Valenciana hay un procés que hay que parar de manera inmediata.
–Entonces, ¿usted cree que la hoja de ruta secesionista se ha implantado en la región con la connivencia de Ximo Puig?
–Es un procés con todas las consecuencias: oficina de 'policía lingüística', en marcha; dinero público para los ‘Países Catalanes’, en marcha; manifestaciones de consejeros de Puig a favor de ello el día de la Comunidad Valenciana, en marcha. Hay algunas cosas que incluso las han superado. El separatismo catalán cobraba comisiones del 3 %, mientras que en el caso Azud estamos viendo que llegan al 6 %. Parece que van perfeccionando los sistemas.
–Este miércoles se celebra el 8M en un contexto marcado por la ley del ‘solo sí es sí’, la ley Trans o el escándalo del ‘Tito Berni’. ¿Cómo valora las políticas que se están llevando a cabo hacia las mujeres?
–El 8 de marzo es una magnífica ocasión que el Partido Socialista, Compromís y Podemos tienen para pedir perdón a las mujeres. Después de haber eliminado la segunda lectura en el cáncer de mama, de haber beneficiado a más de 700 violadores y abusadores en toda España y de proponer la abolición de la prostitución cuando estamos viendo el caso del 'Tito Berni', deberían pedir perdón a las mujeres.
–El PP asegura que Ribó y Puig están amortizados. ¿Asuntos como el de la ley del ‘solo sí es sí’ hacen que Sánchez también lo esté?
–Son proyectos agotados. Todo el mundo lo ve y lo sabe. El de Sánchez es un proyecto fracasado que ha ninguneado a la Comunidad Valenciana desde el primer día: retrasos en el Corredor Mediterráneo, ausencia de la financiación que merecemos, nos quitan el agua, los peores Presupuestos… Esto ha concluido y un dato que lo acredita es que un tercio de los valencianos ya no puede ni pagar la calefacción.