Comunidad Valenciana  Mazón prevé unos Presupuestos «duros» tras recibir de Puig «la peor herencia de la historia»

La elaboración de los Presupuestos de la Generalitat Valenciana para 2024 centrará buena parte de la actividad parlamentaria en las Cortes autonómicas durante lo que resta de año. Actualmente, la Consejería de Hacienda está en coordinación con el resto de departamentos que conforman el Gabinete regional, aunque su presidente, Carlos Mazón, ha augurado este lunes que serán «duros» como consecuencia de tener que afrontar «la peor herencia de la historia».

Con esa afirmación, el mandatario popular ha especificado que el tripartito que hasta el mes de julio lideraba Ximo Puig en coalición con Compromís y Unidas Podemos legó «la mayor deuda pública» y el «mayor déficit». Frente a esa situación, Mazón ha apostado por «poner en marcha otra vez» la Comunidad y para ello ha avanzando que lo hará «garantizando, manteniendo y consolidando» los servicios sociales, la sanidad y la educación porque es «lo primero».

«Hay que hacer un esfuerzo en la gestión económica, en los gastos superfluos y en cosas que parecen consolidadas, pero no tienen por qué estarlo», ha señalado aludiendo a sus predecesores en el cargo: «Parecía consolidado el Gobierno más caro de la historia» y la gestión del nuevo Ejecutivo ha «demostrado que no eran necesarios tantos asesores». En este sentido, ha subrayado que tampoco eran «necesarios tantos políticos» ni un crecimiento del sector público «tan extraordinario».

Decir «la verdad a los valencianos»

Por ello, ha avanzado que los Presupuestos «van a ser duros porque serán estrictos». «Va a ser decirle la verdad a los valencianos, pero de crecimiento y de poner en marcha esta tierra y de acabar con esta presión fiscal inasumible», ha recalcado. En otras palabras, Mazón ha relacionado «dureza» con «rigor» porque las cuentas públicas van a «eliminar todo lo que sobra». Ese proceso el Gobierno autonómico lo hará «poco a poco, pero con decisiones de mucha determinación». «Por ahí van los tiros» de la estrategia que llevará a término la Generalitat.

En cuanto al contenido, el dirigente ha asegurado que los servicios sociales «no solo no se van a tocar», sino que los va a «reforzar» con tal de revertir «las listas de espera más largas de la historia», entre otros aspectos como que no haya «ambulancias SAMU sin médico» o acabar con que las ayudas a la dependencia «no estén llegando a quien tienen que llegar». «No puede ser. Hay que gestionar correctamente los servicios sociales», ha hecho hincapié.

Con tal de lograr ese objetivo, el presidente regional ha indicado que lo hará «sin prejuicios» y favoreciendo «la relación público-privada», así como mejorando «la gestión pública directa allá donde sea». Como muestra de esa política, Mazón ha reivindicado dos decisiones «importantes» que su Gobierno ya ha aprobado, como son los casos de los hospitales de Manises y Denia, dos aspectos encaminados a «gestionar con eficacia la sanidad pública desde lo público». Asimismo, ha priorizado «la calidad asistencial y a los que más lo necesitan», lo que derivará en la toma de decisiones «duras en el ámbito de lo estrictamente económico, de lo político y de la gestión del sector público».

De este modo, los Presupuestos abordarán recortes «en los gastos innecesarios», una tarea en la que, según ha subrayado Mazón, tanto él como sus consejeros van a ser «muy audaces y muy valientes». Respecto a la aprobación de las cuentas, a lo largo del mes de noviembre se celebrarán en las Cortes Valencianas las sucesivas comisiones una vez el Ejecutivo regional les haya dado el visto bueno. El último paso será que el Parlamento autonómico las saque adelante en un pleno específico, algo que no corre riesgo alguno en virtud al pacto de coalición entre el Partido Popular y Vox.

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