El ministro de Transportes, Óscar Puente, junto a Carlos Mazón, María José Catalá y la presidenta del Puerto de Valencia

El ministro de Transportes, Óscar Puente, junto a Carlos Mazón, María José Catalá y la presidenta del Puerto de ValenciaEFE / Biel Aliño

Sin noticias de las infraestructuras del Gobierno de Sánchez en la Comunidad Valenciana

La licitación de la ampliación del Puerto de Valencia supuso una ventana al optimismo, pero Sánchez ha vuelto a dejar en el cajón las reivindicaciones de la región a pesar de la urgencia que muchas de ellas tienen

Como si de un milagro de Navidad se tratara, 2023 terminó con el esperado desde hacía años anuncio de que la ampliación norte del Puerto de Valencia se iba a aprobar por el Gobierno central. Del anuncio se encargó el ministro de Transportes, Óscar Puente, que lo hizo desde el mismo recinto junto al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, la alcaldesa de la ciudad, María José Catalá, y la presidenta de la Autoridad Portuaria levantina, Mar Chao. El ambiente que se respiraba era de alegría conjunta, un rasgo a destacar cuando se trata de administraciones de distinto color político.

Sin embargo, una vez encauzada esa reivindicación, y con los adornos del árbol guardados y los Reyes Magos ya de vuelta en Oriente, la vida política ha retornado a su lugar habitual y la Comunidad Valenciana sigue esperando noticias por parte del Ejecutivo acerca del estado de las infraestructuras que la región necesita de manera urgente y de las que nada se sabe. En cuestión de aeropuertos, desde la Feria Internacional de Turismo (Fitur) Mazón reclamó a Pedro Sánchez que acometa las ampliaciones de los aeropuertos de Manises, en Valencia, y del de Alicante-Elche.

En cuanto al primero, el ensanche sería general, mientras que en el alicantino las obras estarían encaminadas a construir una segunda pista. En ambos casos, el jefe del Consell asegura que ambas actuaciones se deben llevar a cabo «cuanto antes». «Es una de las estrategias más importantes que tenemos a partir de este momento, una vez conseguida la ampliación norte del Puerto de Valencia (...). Tenemos que luchar por ello para evitar morir de éxito», reconoce Mazón. No obstante, esa exigencia no parece que, al menos en el corto o medio plazo, vaya a contar con el respaldo del Ejecutivo.

«Tantos años de castigo»

Como si de un guion de cine o de una novela se tratara, quien ha enfriado todas las expectativas al respecto ha sido, precisamente, el propio Puente. También en Fitur, el titular de Transportes anunció que su departamento trabajará en las mejoras de diversos aeropuertos como los de Josep Tarradellas Barcelona-El Prat, los canarios de Tenerife Sur, Tenerife Norte-Ciudad de la Laguna y César Manrique-Lanzarote, así como en el de Palma de Mallorca y otras actuaciones en Melilla o Córdoba. Además, el premio gordo aeroportuario se le cedió a Sánchez, que anunció a bombo y platillo la ampliación del Adolfo Suárez Madrid-Barajas, en plena crisis migratoria allí mismo. Por tanto, ni palabra sobre la Comunidad, más allá del despeje a córner por parte de la delegada del Gobierno en la región, Pilar Bernabé, que dijo que Moncloa trabajaba en un «proyecto de futuro» sobre los aeropuertos valencianos, pero sin especificar tiempos, objetivos o presupuesto como sí se hizo con los citados.

Tampoco las hubo sobre otras infraestructuras pendientes de ejecución. En Castellón, la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina, denunció en su día «tantos años de castigo» por parte del líder socialista con la provincia. Así, lamenta que a los castellonenses se les haya «negado» la autovía del interior, del mismo modo que, a su juicio, el Gobierno ha hecho con «las conexiones de la autovía A-7 a Benicasim, Villarreal o Vinaroz». «Todas estas obras van a entrar en la agenda nacional, porque no solo son importantes, son urgentes», asegura la dirigente 'popular', a la par que pide «inversión en cuarteles». «Hace falta cumplir con la comisaría de la Policía Nacional en Villarreal y hace falta garantizar a las familias que sus derechos están por encima de los delincuentes que ocupan viviendas de forma ilegal», agrega la presidenta provincial.

El alcalde de Alfafar, en el paso a nivel "de la muerte"

El alcalde de Alfafar, en el paso a nivel «de la muerte»Ayuntamiento de Alfafar

Respecto a Valencia, además de lo concerniente al aeropuerto, las quejas giran en torno al ámbito ferroviario. En la capital autonómica, Catalá denuncia que el soterramiento de las vías de Serrería lleva casi tres años paralizada a pesar de ser una obra clave para el esperado Corredor Mediterráneo y para la vertebración de la ciudad. De hecho, la regidora ha llegado a proponer al Ministerio que permita al Ayuntamiento empezar a tramitar él mismo el proyecto y que Adif le abone posteriormente las cantidades económicas correspondientes.

Trasvase Tajo-Segura

Igualmente, el paso a nivel de Alfafar es uno de los temas a resolver con más celeridad. Denominado el paso «de la muerte», es un lugar donde han perdido la vida 77 personas y sobre el que el Gobierno sigue sin actuar, desoyendo no solo las reclamaciones institucionales del Consistorio y la Generalitat, sino también de los colectivos vecinales del municipio. «Drama ignominioso» lo calificó Mazón en una visita que realizó el pasado día 4 de enero y en la que se reunió con miembros de la Plataforma de afectados por el paso a nivel. La desidia de Puente y de sus antecesores, Raquel Sánchez y el valenciano José Luis Ábalos, con esta actuación es tal que el mandatario autonómico ha encargado a la Consejería del Infraestructuras, pese a no tener competencias, que elabore un proyecto de soterramiento y se lo haga llegar a Madrid.

Del mismo modo que sucede en Valencia, en Alicante las necesidades de equipamientos van más allá de ampliar el aeropuerto. Una infraestructura vital para la comarca de la Vega Baja es el trasvase Tajo-Segura, recortado por Sánchez y la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, basándose, según sostienen agricultores e incluso el Partido Popular, Compromís y el mismo PSPV-PSOE (los dos últimos al menos hasta las elecciones del 28-M), en criterios políticos e ideológicos y en ningún caso técnicos o medioambientales.

Pero no es el único caso. En Alcoy, tal como publicó El Debate, el Ministerio de Óscar Puente no ha tenido el menor reparo en dejar a oscuras uno de los puentes más transitados del municipio, el de Fernando Reig. De los diez focos con los que cuenta, únicamente uno está en funcionamiento, lo que ha provocado que no pocos vecinos se hayan quejado ante una situación cuyo marco competencial corresponde a Transportes.

comentarios
tracking