Poliuretano, Alucobond o lana de roca: los expertos no se ponen de acuerdo sobre cuál fue el material responsable del incendio en Valencia
El componente que habría entre las laminas de aluminio, los falsos techos de escayola de las terrazas y el aire que hubo durante la tarde serían los grandes detonantes de la catástrofe
Dos días después del trágico incendio de Valencia en el que fallecieron varias personas, siguen sucediéndose los interrogantes sobre el material del que estaba revestido el edificio calcinado.
En un primer momento se asoció con el poliuretano, material utilizado en una gran cantidad de industrias y edificios. Su uso y su función como aislante popularizó este tipo de construcciones en los primeros años de siglo. De hecho, las hipótesis iniciales señalaban a este material como el responsable.
Una teoría compartida por decenas de expertos. «Es una espuma que se obtiene por reacción entre 2 sustancias químicas. De características aislantes térmicas excelentes pero que es muy combustible y produce humos densos y opacos», explicaba a El Debate Javier Cándido Fernández, vocal de la Comisión de Seguridad y Protección Contra Incendios del Colegio Oficial de Ingenieros Industriales de Madrid.
Sin embargo, horas después del fuego, la Asociación de la Industria del Poliuretano Rígido (IPUR) señalaba que «no hay evidencias» de que la fachada del edificio incendiado tuviera poliuretano. En un comunicado, la asociación aseguraba que este material no estaba presente «ni como relleno del revestimiento exterior, ni como material aislante en la cámara de aire».
Recordemos que el poliuretano está prohibido en toda la Unión Europea desde 2017 tras el trágico incendio que devoró la Grenfell Tower de Londres. De igual manera, la fachada del edificio estaba compuesta revestida de Alucobond. Se trata de un panel compuesto por dos láminas de cubierta de aluminio y un núcleo relleno de agregado mineral, un material que podría haber recubierto la fachada del edificio valenciano.
Una teoría que la empresa 3A Composites ha negado este viernes. En un comunicado, la empresa afirma que «el Material Compuesto de Aluminio (ACM) utilizado en Valencia no fueron paneles de fachada ALUCOBOND».
Tanto unos como otros han evitado responsabilizarse de lo ocurrido. A esto se suma que Fbex, la promotora del edificio incendiado en Valencia cesó su actividad en el año 2010, víctima de la crisis inmobiliaria. Por este motivo, no se ha terminado de esclarecer qué material exacto componía la fachada.
A pesar de las posibles evidencias que había sobre la utilización de poliuretano y Alucobond, varios peritos y arquitectos confirmaban este mismo viernes que la fachada del edificio calcinado estaba aislada con lana de roca. La utilización de este material, supuestamente ignífugo, ha crecido de manera exponencial en los últimos años. De hecho, según los datos de la Asociación de Fabricantes Españoles Lanas Minerales Aislantes (AFELMA), las construcciones con este tipo de material crecieron en 2022 –último año del que se disponen datos– hasta los 233 millones de euros, un 28 % más que el ejercicio previo. Una teoría que ha sido descartada por las fuentes consultadas por este periódico, dejando al Alucobond, como el material del que estaba revestido el edificio.
Esas casas tienen unas ventanas enormes y al abrirlas hace el mismo efecto chimenea en horizontalPerito y directora de Aguirre y Baeza
Sin embargo, los grandes responsables de que el fuego se extendiera tan rápido y con tanta virulencia se debió a dos factores: los falsos techos de escayola de las terrazas y el aire que hubo durante la tarde, alcanzando rachas de 50-60 km/h. Esto, unido al Alucobond –el cual sí podría ser inflamable– serían los principales detonantes que propiciaron la extensión del fuego.
«Los falsos techos de escayola de las terrazas eran de cartón yeso. Al haberse incendiado los paneles de fachada y los toldos, se ha trasladado el fuego a esos falsos techos y se ha metido en el interior. Esas casas tienen unas ventanas enormes y al abrirlas hace el mismo efecto chimenea en horizontal», explicaba a este periódico Lucía Menéndez, perito y directora de 'Aguirre y Baeza', quien pudo ver con sus propios ojos el edificio calcinado, confirmando cuáles eran los materiales que conformaban su fachada.
A esto se suma la fachada ventilada, con una cámara en la que el aire se cuela para refrescar el edificio. Se trata un sistema bioclimático que permite ventilar todo el edificio. Esto, unido a las condiciones meteorológicas, formaron «la tormenta perfecta» que acabó desembocando en el virulento incendio.
Edificios con características similares
Este tipo de construcciones, popularizadas en los primeros años de siglo por su eficiencia energética y, especialmente, por su bajo coste, estarían repartidas por toda la ciudad.
«En Valencia hay por lo menos tres del mismo constructor. Hay más porque en 2006-2008 ese sistema de fachada estaba muy de moda», concluía la perito.