Obras en el Nuevo Mestalla, en una imagen de archivoEFE/ Kai Försterling

Fútbol

El Ayuntamiento da luz verde a las obras del Nuevo Mestalla para que Valencia pueda ser sede del Mundial 2030

  • Tres lustros después, las máquinas podrán volver a operar en el futuro estadio del Valencia CF, aunque con unas «condiciones muy exigentes» para el club de Peter Lim

  • Desde Vox denuncian que el paso ha sido dado de forma «unilateral» por el PP, con quienes gobiernan en coalición

Tras 15 años paralizadas, se podrán reanudar las obras del Nuevo Mestalla para que Valencia pueda optar a ser sede del Mundial de Fútbol de 2030, que se celebrará en España, Portugal y Marruecos.

La concejalía de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia ha dado luz verde al Valencia CF con una licencia de obra para su futuro campo de fútbol, el Nuevo Mestalla, cuyo esqueleto está ubicado en la avenida Cortes Valencianas. Eso sí, el permiso establece «condiciones muy exigentes» para el club propiedad de Peter Lim. En concreto, para que «cumpla con los plazos de las obras». El club «tiene tres meses para presentar el proyecto de ejecución» del futuro estadio, según ha informado el Consistorio.

Asimismo, ha indicado que la licencia «cuenta con todos los informes técnicos que avalan su completa viabilidad jurídica» y condiciona y penaliza al Valencia CF en caso de incumplimientos de plazos de construcción del estadio.

La administración local ha precisado también que «las obras deberán iniciarse en el plazo máximo de seis meses y finalizarse en el plazo máximo de 30 meses» y «no hasta 42 como pedía» el club de fútbol. Además, ha detallado que «no se admitirán nuevas interrupciones en dichos plazos, salvo causa justificada de fuerza mayor».

70.000 espectadores

Junto con el proyecto de ejecución, y en el mismo plazo máximo de tres meses a contar desde la notificación de la licencia, el Valencia CF «deberá aportar un calendario vinculante de ejecución de las obras con expresa inclusión de hitos o plazos parciales».

La concesión de esta autorización exige que en ese periodo máximo, el club aporte proyecto de ejecución visado por colegio profesional para un estadio de fútbol de 70.000 espectadores, estudio de seguridad y salud visado también, y un escrito en el que se comprometa a no utilizar la construcción hasta tanto no esté concluida la obra de urbanización. A estos documentos se debe añadir estudio de gestión de residuos de construcción y demolición.

Vista del Nuevo MestallaAyuntamiento de Valencia

El Ayuntamiento ha concretado que si en seis meses el Valencia CF no ha iniciado las obras del nuevo estadio, deberá aportar una garantía financiera con el 100 % del coste total de construcción que quede por realizar y en el plazo de improrrogable de quince días desde que sea requerido por el Consistorio.

En caso de que la entidad deportiva no constituya la garantía financiera, la administración municipal iniciará los expedientes administrativos necesarios para la declaración de caducidad y consiguiente extinción de esta licencia.

A esa medida de unirían la derogación del Plan de la Actuación Territorial Estratégica (ATE) Valencia Club de Fútbol aprobado por la Generalitat Valenciana en febrero de 2015 cuya vigencia mantuvo el punto cuarto del acuerdo del Consell –de julio de 2022– por el que se declaró la caducidad de dicho programa.

Adiós a las plusvalías urbanísticas

El Ayuntamiento ha subrayado que la derogación del plan ATE determinará «la completa eliminación de las plusvalías urbanísticas que este instrumento de planeamiento atribuyó a los terrenos propiedad del Valencia CF y la consiguiente recuperación de la vigencia de la ordenación anterior».

Entre los expedientes que se iniciarían si el club de fútbol no constituyera la garantía financiera está también la resolución de los convenios suscritos en 2005 y 2007 entre el Consistorio y la entidad deportiva «por incumplimiento grave de las obligaciones asumidas» por esta última, «la aprobación de su liquidación y la exigencia de la indemnización que proceda por los daños y perjuicios efectivamente causados».

La entrega de la licencia también prevé que si el Valencia CF interrumpe las obras del Nuevo Mestalla, salvo por causa de fuerza mayor, deberá aportar una garantía financiera con el 100 % del coste total de construcción que quede por realizar e igualmente en el plazo de improrrogable de 15 días desde que sea requerido por el Ayuntamiento.

En este caso, la administración local iniciará los expedientes administrativos que resulten necesarios para acordar llevar a cabo las medidas señaladas en el supuesto anterior.

El Ayuntamiento ha expuesto que los condicionantes fijados en la licencia tiene entre sus «objetivos principales» proteger «el interés de la ciudad por encima de todo», además de apuntar que esta «se blinda ante posibles incumplimientos de la propiedad del Valencia CF».

Vista aérea del nuevo Mestalla, en ValenciaEFE

Del mismo modo se persigue desbloquear «la construcción del nuevo estadio contando con las máximas garantías legales para penalizar posibles incumplimientos de los plazos de obras fijados en las licencias» y prevenir y evitar que el club puede aprovechar las plusvalías urbanísticas –que tendría reconocidas después del 3 de agosto, fecha en la que caduca la suspensión de licencias– sin cumplir con la finalización de las obras del estadio.

El Consistorio destaca también que se impulsa la realización de «una auditoría externa e independiente para evaluar el coste de las obras de conclusión de la construcción del Nuevo Estadio, una vez presentado el proyecto de ejecución».

Igualmente, sostiene que con esta licencia, la administración local «va un paso más allá de las condiciones que exigían los grupos de la oposición –municipal, Compromís y PSPV– al incluir la completa eliminación de las plusvalías urbanísticas al Valencia CF en caso de incumplimiento».

Como «instrumento de exigencia», para «ir más allá», el Ayuntamiento ha indicado que usa «las posibilidades normativas y legales que pueden fijarse a través del procedimiento reglado de la licencia urbanística».

Oposición de Vox

Tras anunciar el Ayuntamiento que daba el ok para reanudar las obras, desde Vox, que gobierna en coalición con el PP, han denunciado que este paso se ha dado de forma «unilateral» por los 'populares' tras varias semanas negociando una posición conjunta, según ha denunciado el segundo teniente de alcalde, Juanma Badenas, en un mensaje en la red social X. «Nosotros no podemos estar a favor de ello», ha remarcado el también concejal de Parques y Jardines.