Sonia Castedo pedirá esta semana su reingreso en el PP animada por Francisco Camps

El pasado mayo, tras una larga espera de 16 años, Sonia Castedo, exalcaldesa de Alicante, fue absuelta por el Tribunal Supremo de todas las acusaciones que se cernían sobre ella en el marco del polémico caso Brugal. En una entrevista en primicia con El Debate, Castedo compartió sus emociones ante el fallo y relató el «calvario personal» que sufrió por la sentencia mediática, que junto al abandono por parte del Partido Popular, truncó su carrera política, forzándola a dimitir.

Preguntada en aquel momento durante la entrevista con El Debate por un posible regreso a la política, la exdirigente 'popular' contestó con un rotundo: «Ni de coña. Bajo ningún concepto».

Ahora, y tras unos meses de reflexión, Castedo ha vuelto a hablar con este medio confirmando lo que había dejado entrever en una publicación de Facebook, generando un notable revuelo en la política alicantina: su regreso al PP, partido del que fue apartada en 2014 y al que vuelve gracias al apoyo de Francisco Camps, expresidente de la Generalitat Valenciana.

El largo camino hacia la absolución

Castedo, quien ocupó la alcaldía de Alicante desde 2008 hasta 2014, fue una figura controvertida durante su mandato, en gran parte debido a su implicación en el caso Brugal, donde se le acusaba de amañar el Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) de la ciudad en favor del empresario Enrique Ortiz. Las acusaciones incluyeron cohecho, tráfico de influencias y revelación de información privilegiada, delitos por los cuales fue duramente criticada tanto por la oposición como por sectores de su propio partido y de los que finalmente quedó totalmente absuelta.

La imagen pública de Castedo se deterioró considerablemente debido a la cobertura mediática negativa y a la falta de respaldo por parte del PP, que la dejó sola ante la opinión pública. Este aislamiento culminó en su dimisión el 23 de diciembre de 2014, en lo que describió como «un acto de dignidad personal» frente a la humillación que sentía dentro de su propio partido.

Ahora, con su absolución definitiva, Castedo ha compartido con El Debate una mezcla de sentimientos que se mueven entre el alivio y la resignación. «Mi sensación fue de quedarme absolutamente parada», confesó, destacando el peso emocional que ha tenido esta larga espera y cómo ha afectado su percepción sobre la política y los medios de comunicación.

Un regreso inesperado

Tras un primer «no» rotundo, la vuelta de Castedo al PP es, sin duda, una sorpresa para muchos, considerando su distanciamiento del partido tras su dimisión. En su perfil de Facebook, Castedo ha dejado entrever que su regreso no es una decisión tomada a la ligera, sino fruto de muchas conversaciones con Camps, a quien describe como «un amigo, un compañero, alguien que nunca soltó mi mano» y con quien, según asegura a este diario, se ha visto varias veces durante estos meses y han tenido oportunidad de «reflexionar juntos».

El expresidente del Consell, quien también ha enfrentado y superado sus propios desafíos judiciales, ha sido una figura clave en este retorno. En conversación con El Debate, Castedo afirma que «él me pidió que volviera a subirme al barco para trabajar por y para el Partido Popular, ya que tenemos todo el derecho y la legitimidad», asegura.

Iré esta misma semana a la sede del Partido Popular y me daré de alta como afiliada para volver a trabajar por y para este partidoSonia Castedo

«Tras una profunda reflexión, te puedo confirmar que iré esta misma semana a la sede del Partido Popular y me daré de alta como afiliada para volver a trabajar por y para este partido. Quiero que quede claro que no busco ningún cargo, solo trabajar por mejorar mi partido y mi ciudad como he hecho durante muchos años de mi vida».

Estas palabras reflejan no solo una reconciliación personal con la formación, sino también su intención de renovar el compromiso con los ideales que ambos compartieron durante sus respectivas carreras políticas, dejando atrás la falta de apoyo que vivieron por la anterior cúpula del PP.

Las implicaciones de su regreso

El retorno de Castedo al PP no solo marca un nuevo giro en su vida política, sino que también podría tener repercusiones importantes en el escenario político de Alicante. Con una fuerte base de apoyo y una presencia notable en la política local, Castedo podría convertirse en una figura influyente que desestabilice el liderazgo actual del partido en la ciudad, encabezado por el alcalde, Luis Barcala.

La relación entre Castedo y Barcala, según expresaba la propia exalcaldesa en su entrevista con El Debate, es tensa y distante. Castedo ha sido crítica con la gestión de Barcala, especialmente en temas como la limpieza y la imagen de la ciudad, áreas en las que ella misma había trabajado intensamente durante su mandato, transformando la ciudad con su conocida campaña «Alicante, guapa, guapa y guapa».

Barcala mantuvo la acusación contra mí sabiendo que era inocente para que Ciudadanos no le quitara la AlcaldíaSonia Castedo

La situación actual, con Alicante clasificada como la segunda ciudad más sucia de España, según un reciente ranking de la OCU, podría ser un terreno fértil para que Castedo recupere protagonismo y plantee una alternativa dentro del PP. No es descartable que quien fuera la primera alcaldesa de la ciudad «baje al barro» contra el actual primer edil, quien mantuvo la acusación particular contra ella «a pesar de conocer su inocencia para que Ciudadanos no le quitara la Alcaldía», según palabras de la propia Castedo.

Aunque la expolítica asegura que su regreso «no busca cargos ni protagonismo», su presencia en el partido podría ser interpretada como un desafío directo a la actual dirección local y autonómica del PP.

Un futuro incierto, pero con potencial

El regreso de Castedo al PP, motivado por la confianza de Camps, es un evento que podría redefinir el panorama político en Alicante y más allá. Su trayectoria, combinada con su absolución judicial, le otorgan una legitimidad renovada que podría utilizar para influir en la dirección del partido a nivel municipal y regional.

Mientras que algunos dentro del partido podrían ver su regreso con recelo, otros podrían considerar su retorno como una oportunidad para reforzar la unidad interna y fortalecer el partido con un nuevo 'filón' político.

El impacto de este regreso a la política alicantina y en el futuro del PP está por verse, pero lo que es evidente es que Castedo está lista para recuperar su lugar en el escenario político, con la vista puesta en contribuir a su partido y a su ciudad, «por el momento» desde un nuevo ángulo pero con la misma determinación que siempre la ha caracterizado.