Comunidad Valenciana
El desmantelamiento en un año de las políticas de Ximo Puig, en cifras
Carlos Mazón debuta en un Debate de Política General presumiendo de estar revirtiendo la gestión del tripartito de izquierdas en materias como impuestos, agua, sanidad o independentismo, entre otras
«Sonríe, ya se van» fue el lema que Carlos Mazón utilizó para alzarse con la Presidencia de la Generalitat Valenciana tras las elecciones autonómicas del 28 de mayo de 2023. Con esas cuatro palabras aludía a la ciudadanía de la Comunidad Valenciana para transmitirle que un cambio político tras los ocho años del PSPV-PSOE, Compromís y Unidas Podemos en el Consell era tan posible como deseable. A lo largo de las 60 semanas que lleva al frente del Ejecutivo regional, ha hecho valer ese eslogan para poner negro sobre blanco que el desmantelamiento de la gestión de Ximo Puig se está llevando a cabo.
De toda esa reversión dio cuenta este miércoles durante el Debate de Política General junto a las medidas propias adoptadas y a las que piensa poner en marcha en este segundo año como mandatario. A la tribuna de oradores subió con una voluminosa cantidad de folios que se tradujo en tres horas de discurso. El primer bloque lo dedicó a la herencia recibida y no escatimó tiempo a la hora de enumerar todo lo que su Gabinete ha hecho para dejarla atrás.
Así, uno de los primeros asuntos que abordó fue el referido al recorte en altos cargos de la Administración, una medida que ha aligerado el desembolso de los valencianos, castellonenses y alicantinos en 3,5 millones de euros y asegurando que al final del mandato ese importe se elevará hasta los 20 millones. Ello le ha permitido bajar impuestos a las «clases medias y bajas» por valor de «199 millones de euros». Al respecto, se acordó sutilmente del presidente de Gobierno, Pedro Sánchez: «Nada de deducciones para comprar lamborghinis. Aquí las deducciones son para comprar gafas, hacer deporte o ir al dentista», recalcó.
«Las pancartas no salvan vidas»
Seguidamente, se ocupó de la sanidad, uno de los pilares tanto en la campaña electoral como desde que asumió el puesto. De este modo, Mazón recordó que las listas de espera se han reducido en un 60 %, con lo que de las 2.967 personas que aguardaban una operación, en la actualidad hay 1.058. Como afirmó en una entrevista a El Debate al cumplirse su primer aniversario en la Generalitat, el día más feliz ha sido cuando puso en marcha la máquina de protonterapia que donó el dueño de Inditex, Amancio Ortega, y que socialistas, nacionalistas y comunistas tenían sin utilizar: «Las pancartas no salvan vidas. La gestión, el rigor y la eficacia, sí», le espetó a la bancada de la izquierda.
En cuanto a la educación, el alicantino se mostró especialmente orgulloso de devolver la «libertad» a las aulas frente a la «ideología» impuesta por el Botánico: «La 'policía lingüística', esa burda copia al estilo soberanista catalán con la que quisieron suplir las tareas de la Inspección ya no existe. El control político sobre la educación de nuestros hijos se ha terminado», insistió. Además, criticó que el Plan Edificant, dedicado a construir colegios en la etapa de Puig, «solo destinó dos de cada diez euros que se preveían» a tal efecto, mientras que otras cantidades se fueron a «comprar palacetes» en las tres provincias.
En lo referente al agua, algo «tan esencial para la Comunidad Valenciana y que debería generar tantos consensos», dijo que el tripartito «no estuvo a la altura de casi nada», algo que lo trasladó también a la Albufera, que a su juicio estuvo sufriendo un «abandono» y a la que las formaciones de izquierdas dejaron «sin actualizar en ocho años» el Plan Rector de Uso y Gestión, una «irresponsable indiferencia».
Una de las intervenciones más aplaudidas por los escaños del Partido Popular fue cuando el jefe del Consell habló del fin de las subvenciones a cualquier tipo de entidad que defienda la instauración de los 'Países Catalanes' frente a los «más de 20 millones de euros» que otorgó su antecesor «para alimentar el delirio» independentista y que «ya no se van a volver a pagar nunca». Para despejar dudas, instó a los diputados del PSPV-PSOE y Compromís a que multiplicaran «por cero» la cuantía dada por Puig y sus socios o cualquier otra y obtendrían la que ha destinado y va a destinar su Gobierno.
A lo largo de su discurso tocó innumerables materias, pero merece la pena resaltar el giro de 180 grados que ha impulsado en política turística, que tiene como clave de bóveda la derogación de la tasa turística: «Si miramos a uno de nuestros sectores más importantes, el turismo, la miopía demostrada por el Botánico clama al cielo. La mal llamada tasa turística lo único que consiguió fue que la Comunidad perdiera competitividad y bajara del cuarto al séptimo puesto, según Exceltur», denunció el presidente de la Generalitat.
Vox protesta por no nombrarlos
Aunque desde mediados del mes de julio Mazón gobierna en solitario, hasta esa fecha lo hacía en coalición con Vox. En este sentido, el portavoz de los de Santiago Abascal en las Cortes Valencianas, José María Llanos, aseguró a él y a sus compañeros les había «sorprendido de forma negativa que en las más de tres horas que ha durado el discurso», no nombrara «ni una sola vez» al que fue su socio:
«Vox no ha hecho todo este trabajo durante un año para una noticia o titular, sino para el bien de los valencianos y ellos lo saben porque las políticas de libertad y la reducción drástica de impuestos, ya se están notando en las calles y en el bolsillo de las familias», aseveró el síndico conservador.