La OTAN acusa a China de ser «facilitador decisivo» en la guerra de Rusia contra Ucrania

Los aliados de la Alianza Atlántica, incluido España, han señalado con el dedo públicamente un nuevo enemigo: China. En un duro e inusual comunicado al final de la reunión de jefes de Estado y de Gobierno celebrada en Washington con motivo de su 75 aniversario, la OTAN califica a China de «facilitador decisivo» de la guerra que mantiene Rusia contra Ucrania, además de calificarla de «desafío sistemático para la seguridad euroatlántica».

Asimismo, y de acuerdo con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, Pekín es un socio clave para que Moscú continúe con su esfuerzo bélico en Ucrania, aunque no detalló en concreto que materiales bélicos habría suministrado a Rusia. «China se ha convertido en un facilitador de la guerra a través de su asociación sin límites con Rusia y su apoyo a gran escala a la base industrial de defensa rusa», señala la Alianza.

Otras fuentes occidentales detallaron que el apoyo de China a Rusia en su ofensiva militar contra Ucrania estaría relacionado con el suministro de materiales y servicios de doble uso como componentes de armas, equipos y materias primas que sirven de insumos para el sector de defesa ruso, y hasta semiconductores.

«Las ambiciones declaradas y las políticas coercitivas de la República Popular China continúan desafiando nuestros intereses, seguridad y valores. La asociación estratégica cada vez más profunda entre Rusia y la República Popular China y sus intentos de socavar y remodelar el orden internacional basado en reglas, que se refuerzan mutuamente, son motivo de profunda preocupación. Nos enfrentamos a amenazas híbridas, cibernéticas, espaciales y de otro tipo, así como a actividades maliciosas de actores estatales y no estatales», afirman en el comunicado los 32 miembros de la OTAN.

La declaración es la más dura que la OTAN ha realizado hasta ahora contra China, implicándola directamente en el apoyo a las Fuerzas Armadas rusas en su ofensiva contra Kiev y pone en evidencia, asimismo, el creciente protagonismo mundial de China, un gigante con más de 1.000 millones de personas y que en los últimos años ha reforzado de forma considerable su arsenal militar y sus Fuerzas Armadas. Hasta ahora, EE.UU. era el único país occidental que denunciado la amenaza militar de Pekín.

En su participación en un foro público en la capital estadounidense, el secretario general de la OTAN subrayó, al decir que no se puede permitir la victoria rusa en Ucrania, que eso «no sólo envalentonaría al presidente Putin, sino que también a otros líderes autoritarios en Irán, Corea del Norte y China. Todos apoyan la brutal guerra de Rusia y todos quieren que la OTAN fracase. De modo que el resultado de esta guerra determinará la seguridad global en las próximas décadas. Ahora es el momento de defender la libertad y la democracia, y el lugar es Ucrania».

En su comunicado final, los líderes de la Alianza Atlántica afirman, asimismo, que «China sigue planteando desafíos sistémicos a la seguridad euroatlántica. Hemos visto actividades cibernéticas e híbridas maliciosas sostenidas, incluida la desinformación. Estamos preocupados por la evolución de sus capacidades y actividades espaciales (...) La República Popular China continúa expandiendo y diversificando rápidamente su arsenal nuclear con más ojivas y un mayor número de sistemas vectores sofisticados. Les instamos a participar en debates estratégicos sobre reducción de riesgos y promover la estabilidad a través de la transparencia y seguimos abiertos a un compromiso constructivo (...) pero al mismo tiempo, estamos impulsando nuestra conciencia compartida, mejorando nuestra resiliencia y preparación, y protegiéndonos contra las tácticas coercitivas y los esfuerzos de la República Popular China para dividir a la Alianza», concluyen los aliados.

China: Mentiras y difamaciones

La respuesta china no se ha hecho esperar. Escasamente unas horas después de las críticas de la OTAN, desde la misión de China ante la UE, los portavoces del Gobierno chino rechazaron estas afirmaciones y sostuvieron que siempre han buscado y buscan una «solución política» a la guerra en Ucrania y nunca ha proporcionado armas letales a ninguna de las partes, como si ha hecho EE.UU. y los países europeos, por otra parte.

Beijing insistió en que no proporciona ayuda bélica a Rusia, aunque reconocido que mantiene estrechos lazos comerciales con su vecino del norte. «La declaración de la OTAN se basa en una mentalidad de la Guerra Fría y en una retórica beligerante. Los párrafos relacionados con China están llenos de provocaciones,mentiras y difamaciones obvias», agregaron los representantes chinos. «Son declaraciones falsas y no tienen ninguna prueba de esas acusaciones», señalaron.

Si que está demostrado, por otra parte, es el despliegue que el Ejército Popular de Liberación (EPL) lleva a cabo este verano a través de grandes maniobras y ejercicios militares desde las aguas en disputa del Mar de China Meridional hasta el Pacífico occidental, donde lleva a cabo patrullas navales de la mano de una corbeta rusa.

En este contexto, las autoridades de Taiwán han alertado de que hasta 66 cazas chinos han volado alrededor de la isla, lo que representa la mayor incursión en dos años en su zona de identificación de defensa aérea. Al mismo tiempo, desde Filipinas se afirma que uno de los tres portaaviones que tiene China había realizado recientemente maniobras en alta mar al este de la isla filipina de Luzón, junto con otros tres destructores.