Carmen Gómez Hurtado, antes de uno de sus saltos

Carmen Gómez Hurtado, antes de uno de sus saltosMinisterio de Defensa

Día de la Hispanidad

Esta es Carmen Gómez Hurtado, la paracaidista que ha bajado la bandera del desfile del 12 de octubre

Tiene más de 2.500 saltos en su historial y en junio, con motivo del Día de las Fuerzas Armadas, se convirtió en la primera mujer que saltaba en paracaídas con la bandera nacional

La bandera de España ya ha cruzado el cielo de Madrid para dar comienzo al desfile del 12 de octubre. Su portadora ha sido la paracaidista Carmen Gómez Hurtado, quien ya hizo lo mismo en junio de este año con motivo del Día de las Fuerzas Armadas.

Según la página web de la PAPEA, la Patrulla Acrobática de Paracaidismo del Ejército del Aire, María del Carmen Gómez Hurtado acumula cerca de 2.500 saltos y es la única competidora femenina de la sección.

El desfile de la Fiesta Nacional es posiblemente el más importante de cuantos se celebran en España. Al menos, es en el que participan un mayor número de militares, vehículos y aviones, recordaba estos días Pablo Ojer. Es de tal importancia, y el Ejército español se esmera tanto en que salga lo mejor posible, que la cabo Hurtado no es la única que ha ensayado estos días este salto. Este miércoles, sin ir más lejos, se pudo ver en los cielos de Madrid el último ensayo de las patrullas aéreas que participarán.

Gómez Hurtado nació en Elche (Valencia) en 1985 e ingresó en el Ejército del Aire en el 2005. A partir de ahí, integró durante once años la EZAPAC para trasladarse en 2016 a la PAPEA, donde ha acumulado numerosos méritos y logros tanto individuales como colectivos. «Es de las pocas mujeres que se ha ganado a base de esfuerzo y tesón la boina verde del EZAPAC, para lo que es necesario superar un plan de instrucción de nueve meses, uno de los más exigentes y completos de las Fuerzas Armadas, y que incluye la superación del curso básico de paracaidismo», recoge la Revista de Aeronáutica y Astronáutica del ministerio en su número del pasado mes de marzo.

Carmen Gómez Hurtado, con el uniforme de la PAPEA

Carmen Gómez Hurtado, con el uniforme de la PAPEAMinisterio de Defensa

«Se trata de un plan dividido en dos fases», señala esta publicación. «La segunda fase es más técnica y consiste en avanzar en la instrucción general para el combate, mejorar la condición física, la tolerancia al cansancio y al estrés, el trabajo en equipo y el espíritu de sacrificio. Los que finalmente superan estas dos fases tienen que realizar la instrucción táctica de combate (ITC), alrededor de doce días en los que se intenta simular el estrés y cansancio a los que uno se puede ver sometido en una situación de combate real. Solo unos cuantos elegidos son capaces de superar esta dura instrucción, en la que se lleva a la persona hasta el límite físico y psicológico con distintos ejercicios y evaluaciones. Tras este período, los instructores evalúan y deciden quienes han superado el plan de instrucción con aprovechamiento y se les hace la entrega de la boina verde».

Gómez Hurtado es una saltadora experimentada y precisa, como evidencia su puntuación en algunos campeonatos como el Nacional Militar, cuando quedó segunda en la clasificación femenina dentro de la categoría de Precisión Aterrizaje. Según figura en la web del Ministerio de Defensa, la cabo fue durante 11 años miembro de la EZAPAC (Escuadrón de Zapadores Paracaidistas) antes de entrar en la PAPEA, cuya misión es representar a España y al Ejército del Aire y del Espacio en exhibiciones y competiciones nacionales e internacionales.

Escenarios de guerra

Pero al margen de los cursos y las exhibiciones (e incluso de días festivos como el de hoy) Gómez Hurtado se ha enfrentado a escenarios de guerra en varias misiones de nuestras Fuerzas Armadas.

La cabo Gómez Hurtado consiguió su boina verde en 2006 y realizó su primera misión internacional como tiradora en el destacamento de helicópteros desplegado en la base de Herat (Afganistán), en el año 2008. Después participó en cinco misiones más en Afganistán, tanto en Herat como en Qala-e-now, destinos de alta peligrosidad, entre los años 2009 y 2013. Allí ha experimentado situaciones de peligro muy real, como cuando sufrió una emboscada mientras realizaba una misión de escolta de un convoy.

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