¿Por qué el municipio más rico de Galicia está presidido por una estatua del Che Guevara?

A apenas seis kilómetros del centro de La Coruña se encuentra situado Oleiros, un municipio con casi 38.000 habitantes y que desde hace años encabeza la lista de los más ricos de Galicia. A veces la economía y la política no van de la mano, lo que genera situaciones muy llamativas. En este enclave se da la paradoja de que su alcalde, Ángel García Seoane (conocido popularmente como Gelo), se autoproclama «ante todo castrista», defensor de la revolución comunista de Cuba y lo hace notar con los nombres que figuran en el callejero, donde se les rinde homenaje a figuras como Sandino, Salvador Allende, Simón Bolivar, José Martí o Antonio José de Sucre, entre otros. También hay hueco para la española Dolores Ibárruri, conocida como Pasionaria.

El Ayuntamiento anunció en 2016 su intención de dedicar un parque a Fidel Castro, del que García Seoane es ferviente admirador, pero finalmente no se llevó a cabo ante la voluntad que había manifestado el fallecido líder cubano de no tener ningún monumento.

Lo primero que se encuentran los vecinos y visitantes que llegan en coche al entrar a este peculiar reducto comunista poblado por muchas familias adineradas, lo que se hace notar en la alta cantidad de chalés, es una gran estatua dedicada a Che Guevara, que desde su colocación ha generado numerosas polémicas entre los detractores del guerrillero argentino, al que acusan de ser una persona sanguinaria y un asesino sin piedad. Fue inaugurada en 2008, tiene ocho metros de alto, pesa setenta toneladas y su coste fue de 180.000 euros, lo que la oposición tildó de «despilfarro» en su momento. El regidor comenzó el acto de puesta de largo con un mensaje claro y revelador: «Bienvenidos al territorio libre de Oleiros», según recogen las crónicas de aquel día. El hijo del Che, Camilo Guevara, estuvo presente en aquella jornada.

El día de la puesta de largo de este monumento ya se registraron protestas en contra de su instalación. Desde entonces ha aparecido vandalizado en varias ocasiones con mensajes como «asesino» o «fuera». También ha sido el lugar elegido para protestas contra el régimen cubano. Hace tres años se realizaron concentraciones delante de esta estatua en las que se reclamaron el «fin de la dictadura en Cuba».

García Seoane manifestó que «este es un monumento a la solidaridad internacional, porque si hubo alguien solidario fue el Che». Este político, que lidera un partido independiente, Alternativa de los Vecinos, ocupa el cargo de alcalde desde 1985, salvo un período de siete años en el que estuvo inhabilitado. Igual que el regidor, la estatua con el rostro del Che que preside la entrada a Oleiros acumula años. Ya lleva 16 años en pie.