El sueño cumplido de un coruñés: «Lo veía como algo imposible»

Antonio Rabuñal es un coruñés de 24 años que sufre distrofia muscular y que durante estos días no cabe dentro de sí. Este sábado cumplirá su particular sueño con la presentación oficial de su primer libro: una novela, titulada Un Jardín sin flores, que narra en primera persona la historia de su protagonista, Guille, que vive una etapa complicada como es el cambio del instituto a la universidad.

Si hay una palabra que su autor repite para definir este trabajo es «amor». Eso sí, matiza que no es exactamente «una novela romántica», sino que «cada personaje, tanto Guille como sus amigos, experimentan el amor de una manera diferente» y a lo largo del relato esa percepción cambia.

«Lo que me han dicho es que lo que más tira de la novela es cómo está escrito, de forma poética», explica Rabuñal, al ser preguntado sobre este libro y que ofrece a sus posibles lectores potenciales. «Se trata de sentirte dentro de la novela», señala.

¿Cómo surge este proyecto? Antonio Rabuñal explica que escribe «relatos cortos» en una cuenta en Instagram con el «amor» como tema central y esto se unió a que «siempre» ha querido ser escritor. En un momento en el que estaba desmotivado con la carrera universitaria que había elegido, Economía, decide dar el paso de poner en marcha el proyecto de una publicación.

Así, según indica, una vez termina el manuscrito inicial, se lo envía a una editorial, Atlantis, y esta decide publicar el trabajo de este joven coruñés, que confiesa que le gustaría vivir de sus libros y que «lo veía como algo imposible». «Ya tengo ganas de hacer el siguiente», asegura.

El caso de Rabuñal tiene una dificultad añadida: sufre una distrofia muscular, una «enfermedad degenerativa» que le provoca «limitaciones físicas» y que le obliga a ir en silla de ruedas, pero, según asegura, no tiene limitaciones mentales.

La presentación del libro Un Jardín sin flores se realizará este sábado en la Fundación Luís Seoane, en La Coruña, a las 19:30 horas.

Su padre, Evaristo Rabuñal, confiesa que se siente muy orgulloso de su hijo por haber logrado haber hecho realidad este sueño. «Estoy feliz, es espectacular», afirma. También muestra su agradecimiento a la editorial por haber accedido a publicarlo.