Aceite de oliva
Salud amplía a 17 las marcas de aceite de oliva bajo alerta alimentaria
Esta situación se origina como consecuencia de varias denuncias de particulares por deficiencias en olor y sabor de este producto
En relación con la información aparecida el 10 de marzo, la Dirección de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica de la Consejería de Salud y Consumo de la Junta de Andalucía amplía las marcas de aceite de oliva que han sido identificadas como objeto de la alerta durante las investigaciones que se están llevando a cabo.
Por un lado esta nueva ampliación se origina como consecuencia de varias denuncias de particulares por deficiencias en olor y sabor en aceites de algunas de esas marcas indicadas.
En respuesta a esas denuncias, se han realizado actuaciones por parte de los servicios de inspección de la Consejería de Salud y Consumo y en colaboración con el Seprona de la Guardia Civil.
Hasta la fecha no se han identificado ningún peligro que suponga un riesgo para la salud, más allá de problemas de calidad o supuesto fraude con estos productos que continúan siendo investigados en coordinación con el Seprona y las autoridades de la Junta de Extremadura a través de los canales de información existentes.
Las marcas cuyo consumo se desaconseja son:
- Acebuche
- Galiaceite 2022
- Vareado
- Don Jaén
- La Campiña de Andalucía
- El Convento de Oro
- Virgen del Guadiana
- Cortijo del Oro
- La Abadía
- Villa de Jerez
- Imperio Andaluz
- La Esmeralda
- Los Milagros
- Almazara Fernández
- Oro de Andalucía
- Hermanos Domínguez Salas
- G (Adolfo García S.L.)
Desde Salud y Consumo se ruega que cualquiera que tenga en su poder alguna de estas marcas de aceite de oliva, se abstenga de consumirlo y proceda a contactar con el lugar de compra para su devolución.
Asimismo se recuerda que las investigaciones siguen en curso y se actualizará la información en caso necesario.
Cabe recordar que el pasado 10 de marzo la Dirección General de Salud Pública y del Servicio Extremeño de Salud (SES) intervino la comercialización de nueve marcas de aceite de oliva virgen por no tener registro sanitario y, por tanto, suponer un peligro para la salud pública.
Según indicó Facua, esta alerta alimentaria dió lugar a la inmovilización de alrededor de 68.000 litros de aceite que se iban a vender de manera fraudulenta y que contaban con un etiquetado erróneo.