Carta pastoral
El obispo de Córdoba defiende «el valor moral de la unidad de España»
En la carta pastoral de esta semana el prelado no elude la situación política española ni los conflictos internacionales, y señala que «sólo un cambio de mentalidad y de corazón pueden alumbrar una época nueva»
No se caracteriza el obispo de Córdoba, Demetrio Fernández, por eludir asuntos que suelen 'escandalizar' a las mentes 'bien pensantes' de la época que vivimos. Defender la vida humana, sobre todo, o la moral en la actividad civil y política, es considerado por una parte de la opinión pública como un terreno vedado para la Iglesia católica. Pero no es, ni debe ser, así.
La Iglesia está presente, con su magisterio y testimonio, en el mundo y en la sociedad. «La situación del mundo no es nueva. Es tan vieja como el pecado del paraíso perdido», escribe el prelado en una carta pastoral titulada Amnistía, guerras y espera del Señor y que se publica este jueves. Una misiva en la que monseñor reflexiona sobre los conflictos internacionales y sobre la situación española sin ambages .
Respecto a las guerras en Ucrania y Tierra Santa «y en tantas partes del mundo», el obispo de Córdoba pide que «oremos para que el Señor ablande los corazones y se llegue a un entendimiento, que ahorre tantos sufrimientos de inocentes. El mundo no tiene arreglo si lo dejamos a su suerte, a su mala suerte. Sólo Jesucristo puede arreglar esto, sólo un cambio de mentalidad y de corazón puede alumbrar una época nueva, que sea mejor, no una época en la que vayamos a peor».
La unidad de España
El prelado advierte que la unidad de España está en peligro, pero no es su lectura política ni meramente territorial. Recuerda lo sostenido por la Asamblea Plenaria de los obispos españoles, que apelan a la unidad de la nación como «valor moral» una unidad que puede «quedar quebrada por los egoísmos de un signo u otro». Es, por tanto, una defensa del bien común y del consenso mayoritario que deben primar en una nación democrática lo que pone de relieve el obispo. Y pide rezar por la unidad de España «que es un proyecto histórico de siglos y siglos. Por qué romperla ahora. Y si han de hacerse actualizaciones históricas, háganse en el marco de la Constitución, que todos los españoles hemos aprobado. No alimentemos la división ni el enfrentamiento, ni nos dejemos llevar por egoísmos personales o colectivos».
Pueden leer la carta íntegramente en este enlace.