La comida benéfica de Bangassou este año servirá para dar un futuro laboral a chicos «con las manos manchadas de sangre»

La guerrilla es una triste realidad para muchos jóvenes en la república centroafricana, «chicos y chicas con las manos manchadas de sangre», como ha explicado el obispo de la diócesis de Bangassou Juan José Aguirre, a los que ya se les está ofreciendo una salida laboral y digna gracias a los talleres de formación que ha creado la Iglesia católica y a los que se destinará lo recaudado este año en la tradicional comida benéfica en el Círculo de la Amistad.

Hoy se ha presentado esta cita que llega a su 24ª edición y que es un «motivo de orgullo» para la directiva y socios del Círculo, como ha dicho su vicepresidente Nicolás de Bari Millán, que ha acompañado en la presentación a Miguel Aguirre, presidente de la Fundación Bangassou, y al prelado de la diócesis centroafricana.

Miguel Aguirre ha declarado que a pesar de llevar ya 24 años celebrando esta comida tienen «tanta ilusión como el primer día» puesta en una cita benéfica que permite, entre otras cosas, mantener los más de veinticinco proyectos que lleva a cabo la fundación en Bangassou. Como es tradicional, en el almuerzo se sortearán regalos entre los asistentes y habrá actuaciones musicales, este año con la novedad del grupo 'Trueno Azul', que tienen un repertorio de versiones de éxitos de los años 80.

En el trascurso de la misma se otorgará el 6º premio 'José Luis Caballero', que en esta ocasión le ha correspondido al Cabildo Catedral de Córdoba «por el apoyo constante que prestan a la asociación», ha declarado el presidente de la Fundación Bangassou.

Talleres de formación para los jóvenes de la guerrilla

La comida es una cita tradicional para muchos cordobeses y el ambiente festivo se mezcla con el solidario. Este año lo recaudado servirá para promocionar los talleres de formación en costura, carpintería y soldadura que ya están ayudando a muchos jóvenes a encontrar un lugar en la sociedad tras su paso por la guerrilla, una trágica constante en la vida centroafricana. Monseñor Aguirre ha explicado que estos muchachos y muchachas son echados de sus poblados, una vez abandonan la guerrilla «porque huelen a violencia». Encuentran acomodo y un futuro gracias a la labor de la Iglesia católica a través de estos talleres que les permiten incorporarse a la sociedad.

El obispo de Bangassou ha explicado que muchos de ellos «estaban hace dos años con un kalashnikov en la mano» y ahora «con la gracia de Dios» coinciden en unos talleres donde se juntan «perseguidores y perseguidos», lejos de la violencia y labrándose un futuro. «Es muy bonito ver nacer la esperanza en el corazón de esos jóvenes», ha declarado un obispo feliz por el reciente nombramiento por el Papa Francisco de un obispo coadjutor que le ayudará en la labor misionera y que ampliará el trabajo en estos talleres en el terreno agrícola, porque el nuevo obispo coadjutor «es un apasionado de la agricultura».

La cita será el próximo sábado 9 de marzo, a partir de las dos de la tarde en el Real Círculo de la Amistad. «La venta de entradas va muy bien» ha dicho Miguel Aguirre que ha recordado que, como todos los años, existe una 'Fila 0' para aquellos que quieran colaborar y no puedan acudir a la comida solidaria.