Una mañana de campaña con Almeida: «Antes era el 'outsider', ahora soy el rival a batir»

Son las 9:15 de la mañana de este martes cuando a lo lejos de la calle Almagro aparece José Luis Martínez-Almeida con paso firme. El debate electoral de la noche anterior ha provocado que apenas haya dormido por la adrenalina acumulada. El candidato del PP charla con los medios congregados, entre ellos El Debate, que compartirá esta mañana de campaña con el alcalde de la capital de España. Almeida sube al autobús electoral del PP y conversa con los periodistas donde reconoce estar «satisfecho» con la cita del día anterior en Telemadrid. Es consciente de que en esas citas, se puede perder más que ganar, pero reconoce que «quien tiene su voto decidido no lo modifica por lo que pase en el debate», asegura.

El primer acto del día nos lleva a la Ciudad de la Raqueta. Allí modera un coloquio de Educación, Valores Y Liderazgo que cuenta con la presencia del presidente nacional, Alberto Núñez Feijóo y Toni Nadal, exentrenador de Rafa Nadal y flamante fichaje de la nueva fundación ‘popular’ Reformismo XXI.

Sobre la arcilla, el papel de moderador de Almeida se torna en recibir reveses en forma de pullas de su presidente y de Nadal a colación de sus colores rojiblancos. «Está claro que de Deporte entiendes poco», bromea Nadal, lo que provoca las carcajadas de los presentes, incluida la de Almeida. «Vaya zasca. En el debate de ayer me trataron mejor que aquí», reconoce entre risas el candidato popular.

Tras este acto, El Debate se sube en el coche del Martínez-Almeida y comienza una entrevista donde queremos conocer el lado más personal de alguien que entró en la vida política en 2007 y tras un impasse volvió de la mano de Esperanza Aguirre, con ella empezó todo.

Pero antes de entrar en cuestiones profesionales, Martínez-Almeida se define como «un tipo normal al que se percibe tal y como soy, es decir, con mis virtudes y mis defectos, mis cosas buenas y mis cosas malas, pero no engaño. Soy tal y como transmito». El candidato del PP a la alcaldía de Madrid sobrelleva la pérdida de sus padres con el «recuerdo permanente» y con el agradecimiento «por todo lo que hicieron por mi» . A su padre, Rafael, le agradece «el sentido del humor y la constancia» y a su madre, Ángela, «el carácter, la pasión por la política y el Atlético de Madrid. He tenido mucha suerte con los padres que he tenido», apunta.

El coche avanza hacia el Palacio de Cibeles y Martínez-Almeida se va abriendo un poco más. ¿A qué ha tenido que renunciar por estar en política? El actual primer edil reconoce sin titubear que «no eres consciente de lo que supone la intimidad o tener una vida anónima hasta que la pierdes». Un hecho que contrasta con el «inmenso cariño que recibo», asegura.

«Un político fácil de llevar»

Afirma que es un político «fácil de llevar». «Un buen candidato no puede ser además director de campaña. Y yo, como soy un buen candidato, tengo a la mejor directora de campaña». Habla de Inmaculada Sanz, una de las personas fundamental en el núcleo duro de Almeida y una de las culpables de su éxito. Ya fue su directora de campaña en la pasada legislatura, además de concejal de Seguridad y portavoz .

El coche se detiene en el Palacio de Cibeles y subimos a uno de los rincones más preciados: su despacho, el lugar donde pasa gran parte de su jornada -no ahora en campaña- , aunque no se olvida de pisar la calle, algo que reconoce que le encanta. Antes de entrar a su despacho le reciben Conchita y Mariluz, sus dos secretarias. Una del Real Madrid y otra del Atlético de Madrid. Dos de las personas que mejor le conocen.

Una foto que refleja historia y dolor

En el amplio despacho de Martínez-Almeida destaca la gran cantidad de luz que atesora. Varias estanterías donde acumula algunas corbatas y camisas de repuesto, fotos y recuerdos de Madrid, entre los que destaca una réplica del Santiago Bernabéu o el bastión de mando de la capital. Instantáneas con el Rey Felipe VI, con la Reina emérita, junto a Pablo Casado, jugando al golf otra de sus pasiones, y otra haciendo el camino de Santiago con amigos.

Sin embargo, destacan dos instantáneas por encima del resto. Una, en blanco y negro, donde se ve al alcalde de la capital cubierto el rostro por una mascarilla. Se trata del primer día que Almeida visitó el Palacio del Hielo. Una instantánea cargada de simbolismo y muy dolorosa, pero que le sirve para recordar siempre a aquellos madrileños que murieron durante la pandemia. La otra, a mano izquierda y colgada en la pared. Dos bomberos subidos en una grúa aplaudiendo al cielo. Otro recuerdo a las víctimas de la Covid-19.

El alcalde descubre a El Debate uno de los secretos de su despacho: la habitación donde guarda todo el material con el que entrena cada día a primera hora con su entrenador personal. Pesas, cintas, y demás material con el que Martínez-Almeida se pone en forma cada día tras correr por el Parque del Retiro.

Tras esto, pasamos a una sala contigua donde tenemos la segunda parte de la entrevista. Toca pasar revista a la política a pocos días de las urnas.

–Es la segunda campaña electoral que protagoniza, ¿Qué ha habido de similitudes y diferencias con la anterior?

–Creo que básicamente dos cuestiones que en la anterior estaba en la oposición y ahora estoy en el gobierno. Por lo tanto, ahora soy el adversario a batir, mientras que en la anterior era el outsider , porque nadie daba un duro porque pudiera ser alcalde y porque además, dentro de mi espectro de competidores ideológicamente todo el mundo daba por sentado que Begoña Villacís iba a estar por delante mío y que además Javier Ortega iba a estar mucho más cerca de lo que finalmente estuvo.

Y en segundo lugar, porque obviamente he tenido que compatibilizar la responsabilidad institucional del Ayuntamiento con la campaña. En la anterior campaña me pude dedicar las 24 horas del día a hacer campaña, sin embargo en esta esta he tenido que asumir también todavía, lógicamente, las tareas de gobierno.

¿Mayoría amplia o absoluta? Mientras sea una mayoría que me permita gobernar en libertad, creo que me vale.

–Usted vivió al PP en el Gobierno y vivió en primera persona lo que es estar en la oposición, tras décadas de Gobierno...¿Qué aprendió de todo ese periodo?

–Pese a que habíamos estado 24 años en el gobierno y habíamos transformado para bien Madrid, era obvio que los ciudadanos nos estaban pidiendo otra cosa y eso solo lo podíamos hacer estando cuatro años en la oposición. Y en segundo lugar, que en una democracia quien toma las decisiones es el gobierno, pero tan importante para la democracia es que haya un buen gobierno como que haya una buena oposición.

–Todas las encuestas le dan como claro ganador, pero parece que, por el momento, no consigue la absoluta...confía en ello?

–Confío en llegar a una mayoría que nos permita tener un gobierno que sea sólido, que sea fuerte y que permita ser esa garantía de estabilidad de la ciudad. Mayoría amplia, mayoría absoluta...Mientras sea una mayoría que me permita gobernar en esas condiciones, creo que me vale.

–Si no, ya se ha ofrecido Ortega Smith para ser su vicealcalde

–Ortega Smith se ha ofrecido a ser vicealcalde prácticamente desde hace tres o cuatro meses. Yo me ofrezco a los madrileños.

Maroto hará un Trinidad Jiménez o un 'Pepu' Hernández, han tenido 8 candidatos en 8 elecciones municipales

–¿Mantiene su idea de no incluir a Vox en en el Gobierno?

–Entiendo que estamos en condiciones de poder tener ese gobierno en solitario y esa garantía de estabilidad creo que es bueno para la ciudad. Creo que nos permite tomar las decisiones con más agilidad, tener mejores políticas públicas y por tanto, creo que es bueno, porque además supondrá que hay una amplísima mayoría de madrileños que se han unido en torno a un proyecto común de convivencia en esta ciudad que quien mejor lo representa es el Partido Popular

–¿Cree que Reyes Maroto aguantará el tipo en la oposición o imitará a Pepu Hernández?

–Si atendemos a los antecedentes, hará un Trinidad Jiménez, un Miguel Sebastián, un 'Pepu' Hernández…, Es decir, el Partido Socialista en las últimas ocho elecciones municipales de Madrid ha presentado ocho candidatos.

–Qué le parece los planes de uno de sus rivales Roberto Sotomayor? Quitarle la medalla a Ana Rosa, volar en arco de Moncloa o autobús feminista?

–A mí no me preocupa Roberto Sotomayor, porque todos sabemos que Podemos es un pozo de odio sin fondo que entiende la política única y exclusivamente desde el hostigamiento y desde la crispación. Lo que me preocupa es que Reyes Maroto y Rita Maestre, si le dieran los números, se abrazaría el lunes a Roberto Sotomayor sin ningún problema para poder formar gobierno en la ciudad de Madrid.

La campaña vomitiva contra el hermano de Ayuso no es de Podemos, es de Pablo Iglesias

–¿Qué le parece la campaña de acoso de Podemos al hermano de Díaz Ayuso?

–Me parece que califica perfectamente quién Podemos y, sobre todo, quién es Pablo Iglesias. La campaña no es de Podemos, es de Pablo Iglesias, que es el que sigue mandando. El macho alfa sigue mandando en Podemos. Que nadie tenga ninguna duda de eso. Es él el que ha diseñado una campaña vomitiva de señalamiento de una persona que, por supuesto, todas las instancias de Fiscalía han dicho que no hay ningún tipo de responsabilidad penal.

Una vez acabada la entrevista nos interesamos en dónde pasará la jornada de reflexión el político madrileño: «Todavía se está negociando, asegura entre risas. Lo que sí tiene claro es qué hará el primer fin de semana tras los comicios autonómicos: «Me iré de jueves a domingo a descansar al Norte», confiesa.

Tras la entrevista, toca recibir al Real Madrid de Baloncesto tras su heroica consecución de su undécima Copa de Europa. Ni su sentimiento colchonero le borran el orgullo que siente cada vez que recibe al equipo blanco en Cibeles. Durante su discurso no se olvida de la polémica surgida con Vinicius : «Tenéis toda la solidaridad de la ciudad de Madrid. No al racismo y no a la xenofobia. Una institución modélica como el Real Madrid ni ninguno de sus jugadores tiene por qué soportar que se produzcan ese tipo de comportamientos», aseguró.

Almeida, tomó posesión un 15 de junio de 2019. Siete días más tarde, el 22, recibió, por primera vez, al Real Madrid de Baloncesto. Cuatro años después, en otro 22 de mayo, vuelve Almeida ha vuelto a abrir las puertas de Cibeles a la sección de baloncesto del equipo blanco a punto de acabar la legislatura. Quién sabe si el talismán de un rojiblanco de pro que sueña con revalidar el cargo puede ser el eterno rival. El 28 de mayo hablarán las urnas.