Sánchez aprueba un millón para exhumaciones en el Valle de los Caídos pese a estar paralizadas

El Gobierno de Pedro Sánchez tiene el Valle de los Caídos en el punto de mira desde que comenzó la legislatura. El objetivo es resignificar este lugar y transformarlo en un centro de interpretación. Los primeros pasos para conseguir esta meta es proceder con las exhumaciones que llevan paralizadas desde 2023 porque un juzgado de Madrid anuló el acuerdo con el Ayuntamiento de San Lorenzo de El Escorial por el que se concedió licencia urbanística para las obras necesarias para acometer las exhumaciones en las criptas del Valle de los Caídos.

Lejos de cumplir lo establecido por la ley, el Consejo de Gobierno ha aprobado este marte una subvención de un 1.050.000 euros para «continuar con los trabajos de investigación, de exhumación, de reparación, de Justicia y de verdad en el Valle de Cuelgamuros», ha explicado el ministro Ángel Víctor Torres.

«Es una cuantía que va destinada los trabajos de exhumación para el equipo humano también para la protección, seguridad y el trabajo que se realiza en los distintas criptas», ha expresado el líder de la Cartera de Memoria Democrática.

En este sentido, ha expresado que «en 2021 se aprobó una subvención mucho más modesta, pero con el paso del tiempo y lo que están haciendo, se hacía necesario este esfuerzo».

También ha comentado que «hemos pasado en apenas año y pico de tener 60 peticiones de familiares para exhumar sus restos en el viejo Valle de los Caídos, hoy resignificado Valle de Cuelgamuros a 170 peticiones».

Asimismo, ha recalcado que se ha podido identificar a «12 personas y que la próxima semana se procederá con otras cinco. Ángel Víctor Torres ha querido dar lecciones de historia durante la rueda de prensa del Consejo de Ministros y ha apuntado lo siguiente:

«En Cualgamuros hay 33.000 cadáveres, 22.000 son del bando nacional y 12.000 del bando republicano, el bando vencido y el que defendió la democracia frente al bando del general Franco, con una diferencia que aquí no había concordia», ha expresado el ministro de Memoria Democrática.

A renglón seguido ha relatado que «los restos que llegaban al Valle de los Caídos del bando nacional venían en cajas individuales con el nombre de la persona que eran extraídos de los cementerios y comunicado a las familias. Mientras que los restos del bando republicano venían varios en una misma caja».

El ministro pasa por alto que durante el mandato de Felipe González se dio la orden a Patrimonio Nacional de levantar los osarios y mezclar los restos de varias personas en diferentes cajas. Un cuerpo puede estar repartido en tres lugares distintos del Valle.