Un hombre apalea y acuchilla a su exmujer tras salir del juicio por maltrato en Madrid
La mujer está catalogada como un caso de alto riesgo, mientras que su expareja ha sido detenida nuevamente por quebrantar la orden de alejamiento
Una mujer de 30 años ha sufrido una paliza brutal, acompañada de heridas de arma blanca y golpes con un objeto contundente, apenas horas después de que su expareja quedara en libertad tras un juicio por malos tratos. Tal y como adelantaba el diario ABC, según fuentes policiales, el agresor había incumplido reiteradamente la orden de alejamiento que se le impuso en mayo de este año.
El último ataque ocurrió el pasado 10 de noviembre, alrededor de las nueve de la noche, en las inmediaciones de la estación de Renfe Cercanías de Vicálvaro. Un viandante de 34 años fue testigo de cómo un hombre golpeaba salvajemente a una mujer en uno de los túneles de la zona. Asustado por la agresividad del atacante, optó por alertar a la Policía en lugar de intervenir directamente.
Cuando los agentes de la Policía Municipal llegaron al lugar, el testigo les relató que la pareja había comenzado con una acalorada discusión. En medio de la disputa, el agresor arrojó a la mujer al suelo, le propinó puñetazos y llegó a estamparle la cabeza repetidamente contra el pavimento.
El sospechoso intentó esconderse en el túnel, pero fue localizado poco después, cubierto de sangre. Al ser detenido, su respuesta dejó a los agentes atónitos: «Soy carnicero, por eso tengo sangre, y a mi pareja le pego porque quiero». El hombre, de 33 años y origen ecuatoriano, tenía una orden de alejamiento en vigor desde mayo y ya había agredido anteriormente a la víctima.
La mujer, de origen hispanoamericano, fue atendida por el Samur-Protección Civil y trasladada a un hospital cercano. Presentaba múltiples heridas, algunas de arma blanca y otras causadas por golpes con lo que podría ser una barra de hierro o un palo, aunque el objeto no fue encontrado en el lugar. Según las primeras investigaciones, también fue arrastrada por el suelo durante la agresión.
La propia víctima relató que el día anterior, 9 de noviembre, había sido apuñalada por el mismo hombre en las piernas, el pecho y la zona lumbar mientras él se encontraba en estado de embriaguez. Ese ataque le había llevado a juicio por tentativa de homicidio y malos tratos, pero fue puesto en libertad tras la vista judicial.
Tras el juicio, el agresor volvió a consumir alcohol durante la tarde y buscó nuevamente a la mujer, a quien encontró en el túnel y atacó de forma salvaje. La Policía cree que este es al menos el tercer episodio de violencia sufrido por la víctima.
Actualmente, la mujer está catalogada como un caso de alto riesgo, mientras que su expareja ha sido detenida nuevamente por quebrantar la orden de alejamiento, malos tratos y tentativa de homicidio.