Macrofiesta en Madrid, en una imagen de archivo

Macrofiesta en Madrid, en una imagen de archivo

Madrid aprueba seis macrofiestas en Nochevieja y desautoriza la más grande en Alcalá

El Gobierno regional se limita a autorizar o denegar aquellos eventos que se quieren celebrar en lugares cuya licencia municipal no habilita para espectáculos públicos o actividades recreativas

La Dirección General de Seguridad de la Comunidad de Madrid ha autorizado de momento seis macrofiestas de Nochevieja, que se celebrarán la última noche del año en pequeños municipios de la región, han informado también fuentes de la Consejería de Medio Ambiente, Agricultura e Interior.

Concretamente, han autorizado macroeventos en Ajalvir, San Agustín de Guadalix, Cobeña, Griñón, San Martín de Valdeiglesias y Guadalix de la Sierra. Entre todas suman 4.725 personas previstas.

Concretamente, en Cobeña se celebrará en el polideportivo municipal, con 1.100 asistentes; en San Agustín también en el polideportivo municipal, donde acudirán unas 1.126 personas; en Guadalix, en el gimnasio municipal, para 500 personas.

Por su parte, en Griñón en el polideportivo municipal, para 999 personas; en San Martín en el recinto del patronato municipal de deportes, con un aforo máximo de 500 personas; y en Ajalvir, en el polideportivo local, con un aforo previsto similar al anterior.

Son las mismas fiestas que el año pasado salvo la de Alcalá de Henares, que se celebró sin problemas en 2023 en el pabellón Ruiz de Velasco, donde tenía un aforo 4.275 personas. En esta ocasión la Comunidad de Madrid la ha desautorizada por la oposición de la propiedad, han indicado las mismas fuentes.

El Grupo Casco Antiguo, organizador de la fiesta llamada 'Pavilion', ha informado en un comunicado que tenía toda la documentación en regla y los informes favorables tanto por el Ayuntamiento de Alcalá de Henares como de la Comunidad de Madrid, pero la Fundación Montemadrid, propietaria del recinto, se ha opuesto a la celebración de la misma.

La entidad mantiene un litigio con quien lleva décadas siendo su cesionario autorizado para explotar el recinto, El Club Juventud Alcalá, y con quien el Grupo Casco Antiguo mantiene un contrato de gestión de estos eventos desde el 2022.

«Queremos dejar claro que esta situación es totalmente ajena al Club Juventud de Alcalá, al Ayuntamiento y a la Policía, que siempre han apoyado nuestra iniciativa y por supuesto ajenas a nuestra empresa que ha hecho todo lo posible para garantizar su realización, pero no ha sido viable», señalan desde el grupo.

En este sentido, añade que «hemos tenido dos ediciones maravillosas y habéis dado un claro ejemplo de comportamiento. Esperamos que la situación entre el club y la fundación se solucione y nos permitan realizar con garantía futuras fiestas», subrayan desde la entidad.

Imagen de una macrofiesta en Madrid

Imagen de una macrofiesta en Madrid

Normativa de los eventos

El departamento que dirige Carlos Novillo debe autorizar estos eventos al ser el responsable en lo relativo a la seguridad y a que se cumpla la actividad de lo que se propone en la solicitud. La normativa regional obliga a solicitar autorización para las actividades extraordinarias que se celebran en Halloween o fiestas navideñas como Nochebuena, Reyes o Nochevieja, entre otras.

El Gobierno regional se limita a autorizar o denegar aquellos eventos que se quieren celebrar en lugares cuya licencia municipal no habilita para espectáculos públicos o actividades recreativas porque donde sí se habilita, corresponde al Ayuntamiento. Es decir, las macrofiestas en lugares con licencia para este tipo de eventos no tienen que solicitar nada.

Como en años anteriores, y como ocurre en eventos con afluencia significativa de personas, la Comunidad de Madrid hace un llamamiento a la prudencia de los madrileños apelando al ejercicio de un sano y responsable disfrute de las celebraciones que tienen lugar la última noche del año, y el resto del calendario.

En este sentido, se invita a los madrileños a extremar la precaución durante las celebraciones en recintos cerrados, evitando el abuso en el consumo de bebidas alcohólicas y sustancias, ingesta cuyo uso incontrolado puede incidir en el incremento de situaciones de riesgo en general y, en particular, de accidentes en la carretera.

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