Llega a Carabanchel una nueva electrolinera con 5.509 metros cuadrados y 22 puntos de recarga

Madrid busca tener un modelo sostenible y mejorar cada año la calidad del aire. El área de Movilidad del Ayuntamiento de la capital va a instalar una nueva electrolinera en el distrito de Carabanchel. Este espacio dará cobertura simultánea a 22 automóviles destinados al uso particular, de transporte de viajeros y, también, para la distribución de mercancías. El proyecto tiene un presupuesto de 2,5 millones de euros.

La electrolinera se ubicará en la calle Juan Mieg, 13, cerca del Centro de Operaciones de la Empresa Municipal de Transportes (EMT). El Consistorio ha lanzado la convocatoria porque se concederá en régimen demanial.

Este sistema consiste en que el Ayuntamiento cede la explotación de la electrolinera a una entidad privada por un periodo de 15 años, además se puede prorrogar cinco más.

Este espacio sostenible de recarga de vehículos tiene una extensión de 5.509 metros cuadrados y podrá cargar hasta 22 vehículos de categoría M (coches y autobuses) a una potencia máxima de, al menos, 50 kW en corriente continua.

Además, tendrá cuatro puntos de suministro de 150 kW para automóviles de categoría N1, vehículos que no pesan más de 3,5 toneladas, y N2, aquellos que pesan más de 3,5 toneladas pero menos de 12.

En cuanto a los tiempos de instalación y explotación, se prevé que el próximo 31 de octubre salga la resolución de licitación y que entre 2026 y 2028 se instalen los primeros 10 puntos de recarga de 50 KW para vehículos categoría M y dos puntos de 150 KW para aquellos de categoría N e Y.

Buena calidad del aire

En junio de este año, Madrid registró el mayor «descenso histórico» de dióxido de nitrógeno y por primera vez desde que comenzaron los registros en 2010. Ninguna de las 24 estaciones de la red de calidad del aire ha superado los 30 microgramos por metro cúbico de valor medio.

Hay que recordar que el Valor Límite Anual que marca la Directiva europea de calidad del aire para el NO2 es de 40 μg/m3.

Desde el Ayuntamiento de Madrid han señalado que «desde que hay registros de calidad del aire la capital no había tenido un acumulado de dióxido de nitrógeno tan bajo».

Además, detallan que «la capital cumplió en 2022 y en 2023 con la normativa europea gracias a la adaptación de los madrileños a las medidas que el Ayuntamiento de Madrid ha venido implantando desde 2019 a través de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360».

Si en 2023 se obtuvieron los registros más bajos de NO2 respecto a los de su año precedente, este 2024 los datos de dióxido de nitrógeno acumulado son aún más bajos. A estas alturas, el año pasado se rebasaban los 30 μg/m3 en seis estaciones.

El impacto de la aplicación de medidas globales y progresivas se puede comprobar comparando los datos de 2023 y el año actual con los valores medios de mayo de 2019, cuando estaba Madrid Central en vigor. Entonces, en estas mismas fechas, se rebasaban los 40 μg/m3 que establece la directiva europea.