El restaurante mexicano más auténtico de Madrid

Una gastronomía azteca para servirnos una cocina que enamora, la más tradicional mexicana para entender que hay mucha vida más allá de los célebres tacos, sabores con potencia y buena materia prima para descubrir cuidadas elaboraciones en un espacio acogedor lleno de luminosidad.

Ticui es la última apuesta del Grupo Puntarena en pleno barrio de las Cortes, a escasos metros del Congreso de los Diputados en el número seis de la calle Cedaceros. Arte gastronómico inspirado en el descubrimiento de México para definir la esencia de Ticui comoun regalo de la libertad creativa donde se mezclan los sabores mexicanos con la excelencia de los productos españoles. Ambiente acogedor y moderno para enamorarnos del más genuino México.

Pases que nacen de las manos del chef Federico Rigoletti recordando viajes y charlas con amigos en acampadas en Zihuatanejo comenzando con un delicioso «tiradito» de gamba blanca. Presentación de aires florales que homenajea a la estética culinaria, engatusando a nuestra mirada para enamorarnos en el gusto. Pase lleno de frescura con una estupenda gamba blanca servida al natural de entrada suave y final picante.

Visión mexicana del mar con un ceviche de corvina culminado en notas anaranjadas de suave sabor a través del caviar de trucha, servido en pan tostado. Excelencia para unir dos culturas innovando tesoros del Pacífico para traernos un magnífico «tiradito» de dorada curada que se baña en crema yuzu, sabores cítricos intensos que acarician una suave textura de lomos de dorada que destacan por su calidad. Materia prima para cuidarla con mezcla de sabores intensos en una decidida apuesta por una gastronomía innovadora transportándonos a lugares escondidos de un México abierto al mundo.

Arte, moda y diseño de un espacio que se refleja en los platos y crea ambiente a través de una variada carta de tequilas y mezcales. Primeros brindis con el mezcal La Locura Tobalá, un destilado ancestral de Santa Catarina Minas en el estado de Oaxaca, que se prepara en ollas de barro. Un lujo para los amantes de este alcohol mexicano de color cristalino puro, aroma refrescante con matices agridulces de membrillo y ligeros toques de frutas cítricas que culminan en un retro gusto de hierbas verdes y notas ahumadas.

Brindis que arranca las primeras sonrisas y suben la temperatura para dar entrada a uno de los clásicos de la barra fría de Ticui, un auténtico pase gourmet que encontramos en el solomillo Wagyu, magnífica calidad de láminas de carne para ser coronadas en un imperial caviar de esturión aportando lujo y salinidad a una materia prima que enamora.

Entrantes que continuarán con matices refrescantes a partir de una selección de encurtidos que se enaltecen con una salsa original uniendo el romesco y el pistacho, aires de ensalada con una burrata de calidad acompañada de remolacha o con un pase realmente adictivo para sorprender al gusto, un aguachile de camarón que, con una combinación de pepino, menta y aguacate supone una grata sorpresa y una auténtica explosión en el gusto.

Ticui es un restaurante para conocer platos mexicanos innovadores, metiéndonos de lleno en el México más profundo, cuidando la calidad de la materia prima para encandilar al comensal, pero también un lugar en el que disfrutar de una magnífica coctelería. Entonaremos un Canta y no llores con un cóctel de tequila Don Fulano añejo, chipotle y agua de Jamaica.

Cóctel que descubre un tequila blanco de expresión brillante, frescor en nariz y elegancia recordando notas cálidas de pimienta asada, en boca un abanico de delicadas notas frutales complementadas con herbáceo ligero y suave cuerpo reminiscente de mantequilla dulce. Cóctel que nos abre la puerta de par en par a una excelente sinfonía de tacos. Suprema calidad en los de lengua de Wagyu, refrescante el de salmón con teriyaki con una combinación perfecta y original con el foie, sorprendente y delicioso el taco de «camarón rosarito» que se sirve con suaves abrazos de aceite y col agripicante en un pan de maíz recién horneado para un plato que engatusa y condensa una cuidada fritura con matices frescos procedentes de la col.

Platos tradicionales de México como la «jaiba suave» con salsa agridulce, cilantro y menta, crustáceo de la familia de los cangrejos de textura suave en delicada fritura en unión perfecta con los matices refrescantes del cilantro y la menta. Clásicos de Puebla que nos traen setas de temporada para revestirlas de una de las salsas favoritas del emperador Moctezuma, un manjar de dioses aztecas con el que se alcanza el cielo a través del «Pipián», mole elaborado con semillas de calabaza, chile, ajonjolí, jitomate y cebolla.

Pase caliente que nos transporta a la cocina más sabrosa del México profundo. Homenaje a emperadores que continúa con una espectacular costilla pastor, notas melosas y suaves en una excelente carne preparada al horno para comerla en tacos de maíz. Un bocado culinario majestuoso y delicioso que rivaliza con un tesoro de mar con el pescado del día a la talla que se sirve con adobo de chile y frijoles.

Ticui es un intenso homenaje al México más desconocido, aquel que fusiona dos culturas gastronómicas cuidando la estética y la materia prima, un sitio culinario, con un precio de cincuenta euros por persona, para cantar con tequilas y mezcales al México lindo que aunque no tengamos ni trono ni reina en las cálidas aguas de Ticui navegaremos entre tesoros culinarios para entonar que seguiremos siendo el rey del más genuino sabor azteca.