El plato típico español que horroriza a los extranjeros: «Es una receta muy humilde»
La web de cocina Taste Atlas ha elaborado un curioso ranking de los 100 peores platos españoles
La gastronomía española atesora una fama excelente fuera de nuestras fronteras, con embajadores como José Andrés, que triunfa en EE.UU., o Dani García, el único chef español con una estrella Michelin en Dubái. Hay pocas propuestas que no cuenten con la aceptación del público general, pero la web de cocina Taste Atlas ha elaborado un curioso ranking de los 100 peores platos españoles para los extranjeros.
Algunos son típicamente regionales y castizos, mientras que otros son más informales. El ranking lo encabeza el bocadillo de sardinas, con una valoración de 1.8. Una receta que consideran «humilde». La guía destaca que el bocadillo puede «mejorarse» con «pimientos, tomates, cilantro lechuga, cebollas, aguacates, aceitunas, huevos cocidos, mayonesa, mostaza, salsa de yogur, champiñones, verduras salteadas y aceite de oliva».
Le sigue el caldo de papas, una sopa de cebollas, papas, tomates, pimientos morrones, cilantro, azafrán y huevos, típico de las Islas Canarias, con una puntuación de 2.6. El top 3 lo culmina el gazpacho andaluz de mango, al que han puesto una nota de 2.7. «Como su nombre indica, esta versión se basa en mangos, que se combinan con otros ingredientes como pepinos, tomates, pimientos, chiles jalapeños o chiles, cebollas, chalotes y ajo».
En la cuarta posición, encontramos un dulce; la rosquilla de Santa Clara, originarias de Madrid y tradicionales en las fiestas de San Isidro. «Consisten en una masa redonda con sabor a anís que se cubre generosamente con un glaseado de azúcar en polvo. La masa se envuelve en un círculo, dejando un agujero en el medio». En el número cinco aparece el plato vasco peor valorado, la porrusalda, una sopa de verduras. «Cálida y reconfortante, la porrusalda es una sopa tradicional vasca hecha con verduras como zanahorias, patatas, puerros y cebollas. La sopa se condimenta con ajo y sal, aunque a veces se le añade bacalao seco para realzar sus sabores».
El arroz al horno valenciano se sitúa en el número 8. Un plato muy popular en las casas, cocinado en cazuela de barro y al horno, con costillas y panceta de cerdo, morcilla y garbanzos. Y el siguiente puesto también lo reservan para otra especialidad de la Comunidad Valenciana; el esgarraet, una ensalada con el pimiento rojo asado como protagonista, con bacalao en salazón, ajos y aceite de oliva. El nombre proviene del hecho de que para preparar el plato haya que desgarrar tanto el bacalao como el pimiento en finas tiras.