La Princesa Charlene reaparece en el Gran Premio de Mónaco

Con motivo de la celebración este domingo 29 de mayo en Mónaco del Gran Premio de Fórmula 1, Charlene de Mónaco ha reaparecido para hacerle entrega a Sergio Pérez del galardón. Lo ha hecho de manera deslumbrante, con un precioso mono en color azul celeste. Como suele ser habitual, ha vuelto a apostar por el diseñador sudafricano Terrence Bray, por el que se inclinó también en la gala de los Monte Carlo Fashion Awards.

Poco a poco parece que la exnadadora recupera su presencia pública junto a su familia. Ayer recorrió las instalaciones del circuito junto a su marido Alberto de Mónaco cogidos de la mano y dejando ver algunas otras muestras de cariño entre la pareja, como cuando el príncipe ha cogido a su mujer por la cintura o cuando ella ha tomado a su marido del brazo. A ellos se han sumado Andrea Casiraghi y Alexandra de Hannover, hijos de la princesa Carolina de Mónaco, además de Ben-Sylvester Strautmann pareja de la Alexandra.

Para la ocasión la exnadadora lució un look compuesto por una vaporosa blusa en color azul, unos pantalones blancos sencillos y cómodos de llevar, unos zapatos negros de tacón y sus inseparables gafas de sol.

Su aparición pareció confirmar lo que ya avanzó en los Monte Carlo Fashion Awards, a los que acudió acompañada de su hija Gabriella. «¿Quieres hablar de rumores de divorcio o de mi nueva casa en Suiza?», ha asegurado muy molesta ante los continuos rumores, según recoge Monaco Matin, antes de dejar claro que se tratan solo de «rumores» sobre su vida y su relación.

De hecho, Charlene de Mónaco ha dejado claro que, durante todo este tiempo, el Príncipe Alberto ha sido su máximo apoyo para conseguir superar su gran bache de salud. «Alberto ha sido un gran apoyo, hablamos sobre estos rumores juntos y ha hecho todo lo posible para protegernos a nuestros hijos y a mí», ha explicado.

Con respecto a la infección otorrinolaringológica que ha padecido y que la llevó primero a pasar más de medio año en Sudáfrica, ha reconocido que «todavía es fácil y no quiere ir demasiado rápido». Además, ha confirmado lo duro que está siendo toda su recuperación. »El camino ha sido largo, difícil y muy doloroso”». Pese a ello, reconoce sentirse muy feliz de estar de vuelta en Mónaco con su familia.