La cara B de la boda de Chenoa más allá de la exclusiva

Chenoa y Miguel Sánchez Encinas ya son marido y mujer. Tras más de dos años de espera, la cantante y el médico han hecho realidad uno de sus grandes sueños. Fue el pasado 17 de junio cuando la pareja entonó el ‘sí, quiero’ en una ceremonia íntima y discreta celebrada en uno de los lugares más mágicos y especiales de Mallorca. Frente a la Sierra de Tramuntana y ante la presencia de casi un centenar de invitados, los enamorados se juraron amor eterno y celebraron el que tal vez fuera su día más especial.

Ha sido la revista ¡Hola! la encargada de dar a conocer gran parte de los detalles de la boda más esperada de la temporada. Y es que, aunque todo salió a las mil maravillas, lo cierto es que, como era de esperar, esta no ha estado exenta de polémica.

En los días previos al enlace, los novios ya fueron ubicados en el punto de mira después de que fueran vistos discutiendo en plena calle, según apuntan varios testigos, por la exclusiva pactada con la citada publicación. Al parecer, al urólogo no le ha gustado demasiado la idea de vender uno de los días más importantes de su vida a una revista, ya que, tal y como aseguraron desde Sálvame, «a él no le gusta este mundo y prefiere mantener un perfil más discreto», algo en lo que parece que choca bastante con su ya mujer.

Aunque este supuesto enfrentamiento dio mucho de qué hablar, ambos consiguieron resolver sus diferencias y centrarse en disfrutar del tan esperado día. Y es que, aunque poco ha sido lo que se ha sabido de los recién casados desde que decidieron sellar su amor para siempre, lo cierto es que Chenoa sí ha tenido tiempo de revisar sus redes sociales, e incluso contestar, con mucho sentido del humor, los mensajes que le dejaron varios amigos en su muro de Twitter. Es el caso de Eva Soriano, que después de twittear un cariñoso mensaje dedicado a la cantante, esta quiso corresponderle con una broma que se ha convertido en su primera aparición pública como casada. «Hoy se ha casado Chenoa y estoy mal», escribió Soriano en su perfil. «Siempre seré tuya», contestó la intérprete de Cuando tú vas generando todo tipo de reacciones.

Grandes ausencias

Una de las mayores polémicas que ha rodeado esta boda ha sido su lista de invitados. Aunque las quinielas apuntaban a que iban a ser muchos los compañeros de Operación Triunfo que iban a acompañar a la novia en su día más especial, lo cierto es que finalmente ha habido muchas bajas. En los días previos a la boda ya se sabía que ni Rosa, ni Nuria Fergó, ni Manu Tenorio iban a asistir al enlace porque, tal y como ellos mismos reconocieron, no habían recibido invitación alguna. David Bustamante tampoco acudió, pero este, al contrario que sus excompañeros, no presenció la boda de Chenoa, no por no haber sido invitado, sino porque fue incapaz de cuadrar su agenda y, al final, tuvo que declinar la invitación para poder hacer frente a sus compromisos profesionales.

Natalia, al borde del abismo

Por unas razones o por otras, al final tan solo fueron cuatro concursantes de Operación Triunfo: Natalia, Gisela, Alejandro Parreño y Geno, quienes fueron grabados en las horas previas a la ceremonia. Felices, radiantes y visiblemente emocionados por la alegría del momento, todos ellos se mantuvieron bastante discretos, aunque no tuvieron reparo en confesar lo nerviosos que se sentían, así como las ganas que tenían de presenciar la llegada de la novia al altar.

Pero no todo fueron buenas experiencias. Tal y como ha desvelado la propia Natalia en sus redes sociales, a su vuelta a casa fue víctima de un incidente que podría haberle costado la vida. La cantante se dispuso a coger un vuelo con destino Madrid sin poder llegar a imaginar que en dicho trayecto iba a vivir un momento tan terrorífico, como abrumador: «Ha sido horrible», confesó en su perfil de Instagram.

Al parecer, el avión tuvo que volver a despegar al llegar a Madrid por un fallo en el tren de aterrizaje que mantuvo a la tripulación y a los pasajeros en un estado de absoluto nerviosismo. No obstante, finalmente, todo quedó en un gran susto que, a juzgar por sus palabras, parece que Natalia nunca olvidará: «Hemos tenido un aterrizaje de emergencia cuando íbamos a tocar tierra, pero hemos tenido que despegar otra vez. Ha sido horrible, pero estamos bien», confesó al mismo tiempo que mostraba a sus seguidores las diferentes ambulancias y los dispositivos policiales que se acercaron hasta el avión a expensas de lo que pudiese suceder.